La Comunidad de Madrid ha paralizado de nuevo los proyectos para las obras de ampliación de la línea once del Metro hasta Atocha-Renfe y Conde de Casal, con la excusa de esperar a fondos procedentes de la UE para la financiación de una macro línea bautizada como la «Diagonal» del Metro de Madrid, decisión que los vecinos afectados han decidido rechazar.
«Sin entrar a valorar la idoneidad o no de dicha línea, que antes iba a ser la M-40 del Metro, consideramos inadmisible que se paralice el proyecto ya en marcha de prolongación desde Plaza Elíptica hacia el centro, que se anunció en septiembre de 2017, y cuyo trazado ya se había diseñado con las estaciones de Comillas, Madrid Río, Palos de la Frontera y Atocha-Renfe y Conde de Casal. En estos momentos quedaba hacer el proyecto de obra y licitar las mismas», indica la Asociación Vecinal de Carabanchel Alto, entidad que lleva años protagonizando la pelea por la ampliación de la línea.
En septiembre de 2017 la anterior presidenta regional, Cristina Cifuentes, afirmó que la prolongación estaría en servicio en 2023, con una inversión de 285 millones «aportados íntegramente por la Comunidad». En diciembre de 2019, el actual vicepresidente Ignacio Aguado prometió hacerlo en un plazo de 45 meses con 410 millones de euros. Todas estas promesas quedan de nuevo incumplidas por el argumento de intentar conseguir financiación europea, «lo que no rechazamos, pero para las otras fases de ampliación de la línea», aclara la entidad vecinal.
Han sido muchos los incumplimientos sobre esta línea, que además recientemente ha sido despojada de sus trenes de cuatro vagones para llevarlos a la zona norte (La Moraleja), colocando en su lugar unos de sólo tres vagones, lo que favorece el contacto entre viajeros, en plena pandemia de la COVID-19.
Las asociaciones vecinales de Carabanchel han iniciado una nueva campaña de movilizaciones, que ha empezado con la colocación de carteles y una recogida de firmas, que lleva más de seiscientos apoyos en tan sólo tres días.
«Estas movilizaciones no van a parar hasta que la Consejería de Transportes, a quien hemos solicitado una reunión, habilite los fondos necesarios para continuar con los proyectos y la realización de las obras necesarias, sin esperar a unos fondos cuya materialización depende de muchos factores que sin duda retrasarán los plazos prometidos», asegura la Asociación Vecinal de Carabanchel Alto.