Sanidad Pública de Madrid: lanzan la campaña de vacunación contra la gripe sin vacunas suficientes

Las demoras en la vacunación antigripal en Madrid superaban el mes en la mitad de los Centros de Salud evaluados

La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid ha hecho un muestreo en los Centros de Salud de la región para evaluar la situación de la vacunación antigripal en la que se ha detectado «una contradicción entre el llamamiento que se ha hecho a la población a vacunarse de la gripe y las previsiones organizativas y de vacunas efectuadas para responder al previsible aumento de personas dispuestas a vacunarse».

«No tiene sentido hacer campañas publicitarias llamando a la población a vacunarse si no se le dota al sistema sanitario de los medios para responder adecuadamente», sostiene la asociación.

Para el muestreo se han recogido datos de 34 Centros de Salud (CS) de las siete direcciones asistenciales, la semana del 3 al 6 de noviembre 2020.

El primer hecho llamativo es la gran dispersión de las citas para la vacunación, que van desde una semana (en uno de los CS) hasta el 20 de diciembre en dos de los evaluados. La media de demora de las citaciones fue de 25,6 días, y del total de las citas en 18 CS (52,94 por ciento) superaban el mes.

Se han detectado además problemas con el stock de vacunas que se había acabado en alguno de los CS. En una de las direcciones asistenciales el stock estaba previsto que durase hasta el 10 de noviembre, por lo que se estaban anulando citas a partir de esas fechas, lo que obviamente incrementara las demoras.

Todo ello en una atención primaria saturada por la COVID-19 y las demás enfermedades a las que se ha postergado su atención, que no ha recibido refuerzos y que está desarrollando en muchos casos labores de rastreo ante la insuficiencia de rastreadores en una Comunidad que tampoco ha admitido la ayuda que en este terreno les ofreció el Ministerio de Defensa.

La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid considera que se trata de «otro ejemplo más de mala gestión por parte de la Consejería de Sanidad madrileña, que desatiende la atención primaria, y que explica la cascada de dimisiones de los responsables que intentaban hacer su trabajo con un mínimo de profesionalidad».

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