Las minas antipersona en las fotos de Gervasio Sánchez

El fotógrafo Gervasio Sánchez expone más de cien instantáneas tomadas durante veinticinco años

Gervasio Sánchez es uno de los fotoperiodistas españoles más reconocidos internacionalmente. En su obra destaca el compromiso con los seres humanos más desfavorecidos, víctimas de guerras, injusticias y situaciones precarias, a los que retrata incesantemente.

Su método consiste en acercarse a los conflictos y a la violencia a través del sufrimiento de las víctimas y de sus allegados, y su finalidad es hacer un llamamiento a la conciencia del espectador.

Aunque en 1997 se firmó en Ottawa la Convención sobre la prohibición, empleo y almacenamiento de las minas antipersona, muchos países no respetan los acuerdos y las continúan utilizando.

Desde 1995 Gervasio Sánchez viene denunciando esta utilización que deja cada año más de veinticinco mil víctimas entre muertos y mutilados, a través de una obra en la que se mezclan la fotografía documental y el fotoperiodismo.

Su fotografía «Sofía y Alia», que muestra a una madre mutilada de sus dos piernas durmiendo junto a su hija, se ha convertido ya en un icono de esta situación.

Desde 1995 Gervasio Sánchez viene recogiendo imágenes sobre este drama en su obra «Vidas minadas». Aquel año ya expuso en el Círculo de Bellas Artes de Madrid su primera muestra monográfica, que repitió en 1997 en el mismo lugar y en 2007 en la sede del Instituto Cervantes de Madrid. Cada vez con nuevas fotografías y con nuevos testimonios, a veces resultado del seguimiento que el fotógrafo hace de las víctimas, pues después de fotografiarlas mantiene con ellas contactos permanentes para conocer su estado y su evolución.

Ahora, en la exposición «Vidas minadas. 25 años» vuelve al Círculo de Bellas Artes con más de cien fotografías tomadas a víctimas de minas antipersona en países como Angola y Mozambique, Camboya, Irak y Afganistán, El Salvador, Nicaragua y Colombia y en Europa en Bosnia-Herzegovina.

A través de la obra de Gervasio Sánchez se documentan historias dramáticas, como la de Sokheurm Man, de trece años, herido en 1996 por una mina antipersona en Camboya cuando iba camino del colegio; la de Sofía Elface, de Mozambique, quien pisó una mina cuando tenía once años mientras recogía leña con una hermana menor que resultó muerta; de Manuel Orellana, quien perdió las dos piernas en El Salvador mientras trabajaba en una plantación de café; de Mónica Paola, quien quedó ciega a los siete años en Colombia; de Zar Bibi quien perdió sus dos piernas en Afganistán; de Adis Smajic, quien perdió un ojo y el brazo derecho en Sarajevo cuando jugaba al fútbol con sus amigos; de Medy Ewaz, quien perdió la pierna izquierda en Afaganistán cuando era tan pequeño que ni lo recuerda; de Joaquina Natchilombo, quien perdió en Angola no sólo una pierna sino también a su hija y a una hermana.

El objetivo de Sánchez se fija sobre las víctimas de las minas antipersona, a veces incluso antes de ser intervenidas en hospitales. También las ha fotografiado en instituciones donde se las dota de piernas ortopédicas de plástico y de madera, en centros de acogida, mientras luchan por sobrevivir en entornos hostiles o en sus casas humildes cuando regresan después de un tratamiento precario.

Modelo de fotoperiodista

Gervasio Sánchez (Córdoba, 1959) se licenció en Ciencias de la Información en 1984 y comenzó su trabajo de fotoperiodista como profesional independiente, especializándose en la cobertura de conflictos armados, y más tarde como fotógrafo del «Heraldo de Aragón», periódico en el que continúa prestando sus servicios.

Durante los años ochenta cubrió los conflictos más violentos de Latinoamérica: Nicaragua, El Salvador, Guatemala. Y en los noventa la guerra en la antigua Yugoslavia.

En 1994 la Asociación de la Prensa de Madrid premió sus fotografías de este conflicto, con las que publicó su libro «El cerco de Sarajevo», en el que figura una fotografía de las ruinas de la biblioteca de esta ciudad que ya se ha convertido en un símbolo de la barbarie contra la cultura.

Las consecuencias de esta guerra están también en «Kosovo, crónica de la deportación» (1999) y en «Vida/Life», de 2017.

Estuvo también en las guerras del Golfo, Irak y Afganistán. En 2016 expuso en el Centro Cultural Conde-Duque de Madrid, con la colaboración de la periodista Mónica Bernabé, una muestra con fotografías de mujeres afganas.

Siente una gran atracción por el continente africano. Allí cubrió los conflictos de Angola, Ruanda, Mozambique y Sierra Leona. En 2001 publicó «Los ojos de la guerra», dedicado al fotoperiodista español Miguel Gil, asesinado en Sierra Leona mientras ejercía su trabajo junto a su compañero Kurt Schork (Gervasio expuso sus fotografías de este conflicto en 2008 con el título «Sierra Leona. Guerra y paz»).

En 2001 publicó también «Caravana de la muerte. Las víctimas de Pinochet», y en 2011, «Desaparecidos», sobre los desaparecidos en países como Chile, Argentina, Perú, Colombia, El Salvador, Guatemala, Irak o Bosnia, y en 2021 «Violencia. Mujeres. Guerras».

Desde 2001 imparte clases en la Fundación Santa Maria de Albarracín y en la Fundación Gabo (Gabriel García Márquez). En 2009 fue galardonado con el Premio Nacional de Fotografía.

  • TÍTULO. Vidas minadas. 25 años
  • LUGAR. Círculo de Bellas Artes. Madrid
  • FECHAS. Hasta el 21 de abril
Francisco R. Pastoriza
Profesor de la Universidad Complutense de Madrid. Periodista cultural Asignaturas: Información Cultural, Comunicación e Información Audiovisual y Fotografía informativa. Autor de "Qué es la fotografía" (Lunwerg), Periodismo Cultural (Síntesis. Madrid 2006), Cultura y TV. Una relación de conflicto (Gedisa. Barcelona, 2003) La mirada en el cristal. La información en TV (Fragua. Madrid, 2003) Perversiones televisivas (IORTV. Madrid, 1997). Investigación “La presencia de la cultura en los telediarios de la televisión pública de ámbito nacional durante el año 2006” (revista Sistema, enero 2008).

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