Las nuevas restricciones adoptadas por la Comunidad de Madrid hasta el ocho de febrero de 2021, ha llevado a Hostelería Madrid a denunciar pérdidas de siete con dos millones de euros diarios.
El teletrabajo, la reducción de comensales por mesa y el nuevo horario al que se van a tener que adaptar, limitará a un quince por ciento la actividad de todos los locales, lo cual supondrá pérdidas importantes que irán in crescendo si los contagios no bajan.
Si a ello, según cita la entidad, se le suma el adelanto del cierre nocturno a las nueve de la noche, las cenas serán inviables, dado que poca gente en España cena pronto y esta medida generará unas pérdidas de cuatro con cinco millones de euros al conjunto del sector hostelero en Madrid.
Si bien este sector arrastra pérdidas acumuladas de los meses anteriores, por la limitación de la actividad y la pérdida de facturación de los locales, la previsión es que muchos cierren voluntariamente ante la ausencia de clientes y la limitación de poder dar cenas o comidas numerosas. Los gastos fijos de luz, (cámaras frigoríficas y neveras), además del personal y los gastos de suministros, impuestos y cotizaciones de la seguridad social del personal que ya está en ERTE sin posibilidad de trabajar, hace que la situación sea desesperante para muchos hosteleros.
Desde Hostelería Madrid denuncian que esta medida es un cierre encubierto de bares y restaurantes, aseguran que cumplen con las medidas de seguridad y que ellos no son los causantes de los contagios recientes.
