Isabel Díaz Ayuso antepone una vez más su estrategia contra el Gobierno de Pedro Sánchez al interés general que debería regir su acción política, al adelantar dos meses las oposiciones al Cuerpo de Secundaria y Régimen Especial (RE) en la Comunidad de Madrid para esquivar la aplicación del Real Decreto que prepara el Gobierno de España para estabilizar el empleo interino, señala la secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO Madrid, Isabel Galvín.

Este adelanto, denuncia CCOO, supone perder miles de plazas docentes y que la temporalidad en la educación pública se dispare, pudiendo llegar hasta el treinta por ciento en algunas especialidades.

Galvín señala que, si bien Madrid no ha sido la primera Comunidad Autónoma en adelantar las oposiciones, sí lleva la voz cantante en esta «permanente pataleta» de las autonomías contra el Gobierno central, y en esta ocasión ha decidido saltarse la ley tanto en 2022 como en 2023, lanzando una convocatoria «en diferido» que supone una gran pérdida de empleo público y que arroja una tremenda inseguridad jurídica a los procesos de convocatoria.

2.769 plazas docentes menos

La pérdida de 1794 plazas de secundaria y régimen especial sumadas a las 975 plazas de infantil y primaria que se han perdido con este adelanto suponen un total de 2769 plazas docentes «que se han esfumado por la ambición personal de la presidenta regional», protesta Galvín, para quien «esta pérdida, además de mantener las cifras de temporalidad a un nivel altísimo, supondrá también una merma de la calidad educativa».

Añade que además, las plazas que se convocan no son plazas nuevas, sino que corresponden a la tasa de reposición. Es decir, reponen docentes que se han jubilado o que se han ido de la educación pública madrileña por diversos motivos.

CCOO acusa al Gobierno regional de intentar dividir a los docentes en dos facciones enfrentadas, «como si los intereses no fueran los mismos para todas y todos: el aumento de la inversión educativa, el aumento de la plantilla, y la mejora de las condiciones laborales. Con la maniobra de Ayuso se pierden oportunidades para todos los docentes, tengan más o menos experiencia, y se mantiene la precariedad que afecta a un porcentaje altísimo de la profesión».

Galvín tilda de «vergonzoso» que el Gobierno de Díaz Ayuso publicite esta convocatoria «como una buena noticia cuando supone una pérdida de puestos de trabajo y, a la larga, un deterioro de la educación pública madrileña. Lo que ellos anuncian como la convocatoria de 5.500 plazas es un intento de no convocar las 8.245 plazas que deberían haber sido convocadas: no es una suma, es una resta».

Movilizaciones

El sindicato considera que esta convocatoria, junto con la reciente aprobación de la Ley Maestra, es un nuevo atentado contra la educación pública mediante la precarización de las plantillas y el desvío de sus fondos hacia el negocio de la educación privada.

Los sindicatos han anunciado movilizaciones y protestas para que se convoquen las plazas de docentes necesarias para estabilizar al personal interino de la Comunidad de Madrid, y frenar la continua precarización de las condiciones del personal docente.

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