Un grupo de personas movilizadas para eliminar del callejero de Madrid las referencias al franquismo se han dado cita este 27 de enero 2023 en la calle «Caídos de la División Azul», para mostrar el rechazo que produce en la ciudadanía que se ensalce la memoria de una unidad militar que estuvo a las órdenes de las tropas alemanas del régimen nazi, responsable directo del Holocausto.
Se ha elegido esta fecha, en la que se celebra el día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto, para denunciar la incompatibilidad de mantener una calle en recuerdo de los caídos de la División Azul con los valores democráticos.
La acción ha estado impulsada por la llamada Plataforma Calles Dignas[1], que promueve la eliminación de los nombres incompatibles con los valores democráticos, y en particular la devolución a seis calles en Madrid de los nombres acordados en 2017 y que el actual equipo de gobierno municipal, presido por José Luis Martínez-Almeida, cambió por los antiguos nombres franquistas.
Desde la Plataforma sostienen que cuando está cerca de inaugurarse en Madrid un monumento en memoria a las víctimas del holocausto, resulta despreciable que las mismas autoridades que presidirán el acto de inauguración mantengan al mismo tiempo el nombre de sus verdugos en una calle.
Añaden que «para colmo de la ignominia», el nombre acordado para esta calle en votación plenaria por el Ayuntamiento de Madrid en 2017 fue el de «Memorial 11 de marzo de 2004», que será objeto del recuerdo anual en poco más de un mes, por estas mismas autoridades que, con su pasividad primero (al no presentar recurso), y su voto después (al votar en contra el pasado 25 de octubre), decidieron anular la memoria de estas víctimas en el callejero madrileño.
En el acto de hoy se ha leído el texto de Ana Frank: «Lo que se hace no se puede deshacer, pero se puede prevenir que vuelva a ocurrir», y las personas asistentes, representantes de diversos colectivos, educativos, vecinales, memorialistas y sindicales, han mostrado carteles e imágenes que reclaman la necesidad del cambio de nombre de la calle, guardando un minuto de silencio al finalizar.
Apoyo judicial a la retirada del callejero franquista
En una sentencia del Tribunal Supremo conocida el 20 de diciembre de 2022 se considera que la decisión adoptada por el Ayuntamiento de Madrid en 2017 de retirar el nombre de la calle Asensio Cabanillas, por su vinculación franquista, se ajusta a derecho.
La sentencia afirma que «la exaltación proscrita por el artículo 15.1 de la Ley 52/2007 es la que producen actos de las Administraciones Públicas que objetivamente realzan, ensalzan, dignifican o suponen un reconocimiento elogioso de cualquiera de los hechos que identifica su inciso final o todos ellos: la sublevación militar de 1936, la Guerra Civil o la represión de la Dictadura», dejando claro que no es necesario que se produzcan las tres circunstancias mencionadas por la ley, sino una cualquiera de ellas.
Con esta sentencia, el actual equipo de gobierno municipal de Martínez-Almeida queda fuera de la legalidad, como cuando votó el pasado 25 de octubre contra la aplicación de la nueva ley de Memoria Democrática que obliga a las administraciones a retirar de la vía pública los elementos que signifiquen exaltación o apología del franquismo.
- En la fotografía de portada aparecen representantes de:
Fundación Ángel Llorca.
Movimientos de Renovación Pedagógica de Madrid.
Federación Regional de Asociaciones de Vecinos.
Asociación de Vecinos Valle Inclán (Chamartín).
Asociación de Vecinos Carabanchel Alto.
Asociación Mesa Memoria Histórica de Latina.
Asociación La Comuna.
CGT Enseñanza
CCOO (Unión Sindical Madrid).
Federación
FETE-UGT.
PSOE (concejal Ayto Madrid Ramón Silva).
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