Comisiones Obreras informa de que el colegio público Ana María Matute de Getafe comunicó el pasado 20 de octubre a la Consejería de Educación que había detectado entre el alumnado algunos casos de covid y que procedía al confinamiento de cinco aulas, pero Salud Pública no inició las pruebas de cribado hasta el 5 de noviembre.

Este retraso de las autoridades sanitarias de la Comunidad de Madrid se produjo a pesar de las continuas peticiones de actuaciones y de solicitud de medidas preventivas e incluso del cierre temporal del centro educativo.

El sindicato añade que «inexplicablemente dichas pruebas solo incluyeron al alumnado, dejando fuera al profesorado y demás trabajadores y trabajadoras del centro educativo. Una descoordinación y falta de diligencia que ha provocado que un pequeño brote que se podía haber atajado con una actuación rápida haya derivado en una extensión del contagio que ha obligado a confinar dieciocho de las veintiocho aulas del colegio».

«Han comunidado al centro que el personal laboral, auxiliar y docente no está incluido en las pruebas diagnósticas porque el Servicio de Prevención de la Consejería de Educación no lo ha solicitado», explica Isabel Galvín, secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO de Madrid, quien señala que «es muy penoso y lamentable ver cómo las administraciones se culpan entre sí por la inacción y el posterior desaguisado».

CCOO denuncia que los centros están solos ante el virus, con unos protocolos  ambiguos que depositan en el profesorado la responsabilidad ante la posibilidad de contagio, pero no la potestad para tomar medidas que lo eviten, y con unas administraciones públicas que o no contestan o no se coordinan

«La consecuencia es que tenemos un colegio en Getafe que a día de hoy tiene más de la mitad de sus aulas confinadas», protesta Galvín.

Concluye que «la bola de nieve ha llegado hasta aquí porque en su momento no se determinó hacer pruebas de cribado que detectasen los positivos. Actuar a tiempo es lo que se espera de la Comunidad de Madrid y, por supuesto, coordinación entre los centros educativos, las Direcciones de Área, Salud Pública y los Servicios de Prevención. Alguien detrás de los teléfonos que dé respuestas, directrices y medidas por escrito para implementar en los centros».

DEJA UNA RESPUESTA

Escribe un comentario
Escribe aquí tu nombre