El colágeno es uno de los elementos más presentes en nuestro cuerpo. Se estima que una de cada cuatro proteínas en el organismo es de colágeno, lo que supone alrededor del siete por ciento de nuestra masa corporal de media. 

Pero, ¿qué es exactamente el colágeno y qué beneficios nos aporta? Se trata de una de las búsquedas estrella en Google en los últimos tiempos, y este interés se ve reflejado también en la enorme oferta de suplementos alimenticios de colágeno o de productos cosméticos que lo contienen. 

Los efectos secundarios del colágeno, en cuanto a su consumo oral, son reducidos y se considera un producto adecuado para prácticamente todo el mundo y con un gran potencial beneficioso, pero aún así este debe aplicarse siempre bajo supervisión o aprobación médica.

Qué es el colágeno

Cuando hablamos de colágeno nos estamos refiriendo a la proteína que fabrican los fibroblastos, unas células de nuestro organismo con esa función. A su vez, el propio colágeno cumple multitud de funciones en nuestro cuerpo, principalmente estructurales todas ellas, pues su mayor capacidad es la de mantener unidos elementos del organismo. Podría decirse que es la argamasa de nuestros ladrillos. 

Y su importancia es tan grande como la sencilla metáfora indica. Desde los tejidos conectivos como músculos, ligamentos y tendones hasta los cartílagos, órganos, el tejido adiposo y nuestra piel, donde está presente en grandes cantidades, el colágeno mantiene nuestro cuerpo funcionando con todo en su sitio. 

Resulta especialmente importante para deportistas y atletas, pues el mayor desgaste que sus articulaciones sufren hace que una acción adecuada del colágeno sea más importante que nunca, pero también tiene un gran efecto sobre nuestro aspecto, por eso tantos productos cosméticos para la piel lo incluyen. 

En la piel, el colágeno es responsable de mantenerla firme, elástica y en un estado óptimo. Debido a que partir de los veinticinco años la piel empieza a reducir su producción natural de colágeno en los fibroblastos, efecto que se acentúa a partir de los cuarenta años, es común que las líneas de expresión y el envejecimiento de esta sea más visible. 

Cómo mejorar los niveles de colágeno

Vista la gran importancia de esta proteína, es muy recomendable tener en cuenta el colágeno en nuestros hábitos de vida, sobre todo a partir de cierta edad, para mantenernos sanos y con un buen aspecto. 

En este sentido, lo que más impacto tiene con diferencia es mantener una alimentación sana y equilibrada y hacer ejercicio físico habitualmente, especialmente incluyendo deportes o actividades de impacto como el running o la mayoría de deportes que incluyen carrera o saltos. 

También hay productos y tratamientos cosméticos que aportan colágeno a la piel o estimulan los fibroblastos para que se reactiven, ya sea mediante vibración y masaje, con la aplicación de calor o en forma de sérums o cremas. 

Por último, también existen numerosos suplementos alimenticios ricos en colágeno que, aunque son sanos en la mayoría de ocasiones, no siempre implican necesariamente un aporte de colágeno real al organismo: al tratarse de una proteína, nuestro sistema digestivo la descompone en los aminoácidos que la conforman, y el organismo no tiene por qué volver a usar estos aminoácidos para formar colágeno específicamente. De hecho, lo más común es que no lo haga. Sin embargo, como aporte proteico siguen siendo beneficiosos.

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