La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha hecho pública la ruptura de relaciones con el estado de Israel incluído el hermanamiento con Tel Aviv, que se formalizó junto al de Gaza en 1998 bajo la alcaldía de Joan Clos, en reconocimiento a los «Acuerdos de Oslo».
Lucha Internacionalista (LI) informa de que para llegar a esta decisión de Ada Colau ha sido necesaria una dura y larga campaña, iniciada en 2008, después de que Israel bombardeara Gaza y asesinara a más de mil personas.
LI explica que han sido muchos años de manifestaciones y actos, hasta que, en torno a la campaña «Barcelona con el apartheid no» se consiguió, junto a la Comunidad Palestina, reunir a 112 entidades desde sindicatos a partidos y todo tipo de movimientos desde los israelíes antisionistas, feministas, antirracistas, anticolonialistas, por la liberación sexual y de género, por la vivienda… hasta el último empuje: conseguir firmas suficientes para forzar a que la alcaldía rompiera el hermanamiento.
Lucha Internacionalista señala que «esta victoria de hoy es un reconocimiento, en primer lugar, a la resistencia del pueblo palestino, que resiste al cruel régimen del apartheid colonialista del estado de Israel desde hace 75 años. Resistencia reconocida hasta en el dictamen de la Sindicatura de Greuges –Defensor del pueblo- de Barcelona que, a petición de la campaña, recomendó la revocación del Hermanamiento con Tel-Aviv porque mantenerlo conlleva una complicidad en la configuración de un crimen de apartheid».
Agrega que la situación tanto en Gaza como en Palestina se ha agravado con la deriva aún más supremacista, radicalmente violenta y represiva del estado de Israel impulsada por el nuevo gobierno: asesinatos, bombardeos, ilegalización de organizaciones, detenciones, demoliciones de hogares e incautación de tierras. La última concentración se produjo en homenaje a los 231 palestinos asesinados en 2022, y sólo en enero 2023 se han contabilizado otros 35.
Lucha Internacionalista espera que «el paso que ha dado la alcaldía del Ayuntamiento de Barcelona inspire y anime a más instituciones de Cataluña y de fuera a romper su complicidad con el apartheid israelí», aunque avanza que «no será fácil» porque Martínez-Almeida, del PP, ha ofrecido Madrid para hermanarse.