El sector del ladrillo ocupa un puesto de suma importancia en nuestra estructura económica, fruto de la enorme demanda que existe en torno al mercado inmobiliario hoy en día. En este sentido, el correcto desarrollo de proyectos de construcción depende en gran medida de los equipos que se emplean durante el proceso de obra y, por eso, las empresas están obligadas a buscar en todo momento los mejores recursos de alquiler disponibles.

Con esto en mente, hoy queremos hablar de los contenedores de obra: tanto de las ventajas asociadas a su alquiler como de los diferentes modelos que puedes encontrar en las mejores empresas especializadas.

Por qué alquilar contenedores de obra

Para que un proyecto de construcción se desarrolle de forma diligente, con independencia de si se trata de un edificio nuevo o de una reforma, es importante contar con los mejores equipos de la industria. Momento en el que los contenedores de obra pasan a ser un recurso de gran ayuda. Eso sí, nuestra sugerencia es que, dado lo esporádico que resulta su uso, optes por recurrir a una empresa de alquiler de contenedores.

Estas compañías se encargan de llevar el contenedor en cuestión al lugar de tu obra y, posteriormente, se encargan de su recogida. Durante el transcurso de la construcción o la reforma, podrás arrojar todo tipo de residuos, bien sean ladrillos, madera, cables o cualquier otro desecho que necesites. Un soporte que te va a simplificar en gran medida las cosas para agilizar el rendimiento y resolver el proyecto lo antes posible. Todo ello sin tener que comprar dicho contenedor y estar obligado a disponer de un espacio en el que dejarlo el resto del tiempo.

Ventajas de alquilar el contenedor de obras

El alquiler de contenedores trae consigo una serie de ventajas que conviene valorar, siendo la más destacada de todas la óptima gestión de los residuos que se produce. Los contenedores de escombro evitan la acumulación de desechos, incentivando en el proceso la eliminación responsable de todas las basuras.

De igual modo, conviene comentar que se trata de una medida de ahorro, ya que no deberás tener un vehículo propio para llevar de un lugar a otro todos los residuos generados. Tampoco será necesario contar con un almacén de gran envergadura en el que dar cobijo al contenedor una vez finalices el proyecto: la misma empresa de alquiler lo hará todo por ti.

Elige el tamaño perfecto según tus necesidades

Cuando vayas a contratar este servicio, pronto te encontrarás con una amplia variedad de opciones. Si bien es cierto que lo más habitual es el alquiler de contenedores metálicos, el tamaño sí puede cambiar en gran medida según las necesidades de cada proyecto. A fin de cuentas, no es lo mismo una pequeña reforma que la construcción de una gran urbanización.

En este orden de ideas, encontramos modelos de diferentes dimensiones que van de los 3 m3 hasta los 30 m3. Es evidente que el precio de contenedores de obra va a cambiar también según el tamaño del soporte en cuestión; no obstante, recuerda que alquilar un contenedor termina suponiendo un ahorro. Por lo que no escatimes en gasto y reserva el modelo que más se ajusta a tus necesidades concretas en cada caso.

Otros recursos de obra que debes alquilar

Si bien es cierto que los contenedores de obra se presentan como una de las inversiones más habituales en lo que respecta al alquiler de recursos para este tipo de proyectos, conviene destacar que las mejores empresas disponen de otros tantos elementos que conviene valorar. Analízalos todos en detalle y así te asegurarás de ir preparado para asumir los proyectos de construcción más complicados.

En este orden de ideas, encontramos el alquiler de carretillas elevadoras, de andamios, de compresores, de encofrados, de grupos electrógenos, de hormigoneras, de minicargadoras o de transpaletas. Unos cuantos ejemplos de todo cuanto debe entrar en tu presupuesto de cara a asumir trabajos de obra con tu empresa o, incluso, de forma personal. 

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