Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con EUROPOL, han desarticulado una organización criminal dedicada a la distribución de cocaína en España, y se ha detenido a tres personas cuando pretendían trasladar 101 kilogramos de cocaína desde una nave industrial ubicada en Torrejón de Ardoz (Madrid).
Los detenidos simulaban transportar chatarra y utilizaban una furgoneta en la que ocultaban la droga en el interior de varios electrodomésticos en estado de abandono para evitar levantar sospechas.
Además de la sustancia estupefaciente los investigadores se han incautado de 55.000 euros en efectivo, un vehículo y cuatro teléfonos móviles.
Establecerse en Madrid
La investigación se inició cuando los agentes se percataron de la presencia de un grupo organizado, en la zona del corredor de Henares, dedicado a la distribución de gran cantidad de cocaína procedente de Colombia. Además el grupo criminal estaba tratando de establecerse en la capital de España.
Avanzadas las pesquisas los investigadores lograron identificar a una persona perteneciente a la organización, responsable de la compra y distribución de la cocaína. Este hombre había estado involucrado en otras investigaciones por hechos similares y era conocido en el mundo de la delincuencia por ser un experimentado químico capaz de hacer de primera mano las verificaciones para determinar el grado de pureza de la cocaína y una vez adquirida proceder a su adulteración.
Posteriormente los agentes lograron identificar a otro hombre, mano derecha del químico y encargado de coordinar los aspectos logísticos de la organización, además del responsable de la recogida, transporte y guarda de la sustancia estupefaciente.
Esta persona se vestía de operario de limpieza y simulaba recoger en una furgoneta residuos municipales para trasladar y transportar la droga desde un punto a otro de la Comunidad de Madrid.
Una vez avanzadas las pesquisas los agentes averiguaron que los investigados planeaban la recogida de la sustancia estupefaciente en el interior de una nave situada en Torrejón de Ardoz (Madrid). Tras acudir al mencionado lugar, dos personas fueron arrestadas cuando recogían 101 paquetes de cocaína, de un kilogramo cada uno, y los transportaban en la furgoneta hasta un lugar seguro.
La droga iba oculta en el interior de varios electrodomésticos en estado de abandono, que en principio iban tratados como residuos destinados a algún punto limpio. Finalmente, el químico y máximo responsable del entramado criminal, fue detenido cuando abandonaba su domicilio.
El juzgado que sigue la causa ha decretado el ingreso en prisión provisional para los tres investigados.