Las cuatro plantas de la sala de exposiciones del Canal de Isabel II en Madrid albergan más de cien fotografías de los reportajes de moda que la fotógrafa Joana Biarnés (1935-2018) realizó entre 1962 y 1972.
Con el título «Madrid/Moda a pie de calle» se han reunido las fotografías que, al margen de su actividad como fotoperiodista (fue la primera mujer española en este género), la fotógrafa de Terrassa dedicó al mundo de la moda.
A través de este trabajo se aprecia la evolución de la moda española durante una de las décadas más decisivas del prêt-à-porter, pero también, dada la preferencia de la fotógrafa por situar a sus modelos en las calles de Madrid, lejos de la sofisticación de los escenarios y de los estudios, se muestra el cambio en el urbanismo de los barrios de la capital de España.
Al mismo tiempo que las fotografías, se exhiben en esta exposición algunos de los vestidos que llevaban las modelos que los lucieron en desfiles y pasarelas, trajes de Asunción Bastida, Carmen Mir, Elio Berhanyer, Paco Rabanne, Mary Quant o Antonio Nieto, así como el que la cantante Karina lució en el Festival de Eurovisión de 1971.
La exposición se ha ordenado en siete capítulos a los que se han asignado títulos relacionados con sus contenidos: Aires de costura, De la pasarela al bulevar, De Tuset a Moncho Street, Madrid-París-Londres, Trajes para una canción, ¡Viva la calle! y En busca del paraíso.
La última planta está dedicada a la moda ad lib balear influida por el movimiento hippy. La exposición se cierra con un documental que recoge testimonios de la fotógrafa y de algunas personas que la conocieron.
Biarnés abordó la moda con la misma dedicación que el resto de los temas que documentaba, ya fueran de actualidad, deportivos o de sociedad, y esta es una de sus principales aportaciones.
Con este género se inició en Barcelona, pero fue Madrid el escenario de la mayor parte de sus fotos al publicar asiduamente en La Moda en España, la revista que dirigía Pilar de Avia, y en un suplemento semanal del diario Pueblo en colaboración con la periodista Rosana Ferrero.
De esta forma se convirtió en la cronista de la evolución de la moda entre los años sesenta y principios de los setenta, del clasicismo de la alta costura a la informalidad del prêt à porter.
Una fotoperiodista de moda
Joana Biarnés se inició en la fotografía cuando sustituyó a su padre haciendo un reportaje sobre una cueva de estalactitas y estalagmitas en 1953.
Después cubrió con él las inundaciones del Vallès de 1962. Sus fotografías de esta tragedia se utilizaron por TVE para ilustrar los telediarios.
Comenzó como profesional haciendo con su padre fotografía deportiva, resistiendo los insultos e improperios que tenía que oír en los campos de fútbol porque una mujer se dedicara a un oficio tan «masculino».
Hizo fotografía de calle con Ramón Massats («la fotografía –solía decir- no se enseña en las academias, sino en la calle»). Como freelance para Pueblo y ABC retrató a la jet set de Madrid y Barcelona (Raphael, Sara Montiel, Massiel, Marisol) y a personajes como Orson Welles, Audrey Hepburn, Yul Brinner, Raquel Welch o Dalí, a quien le unía una gran amistad.
Un reportaje sobre Los Beatles en 1965 durante la visita a España del grupo de Liverpool le valió conseguir un contrato fijo en Pueblo. Había viajado con ellos en el vuelo Madrid-Barcelona y consiguió colarse durante tres horas en el apartamento que ocupaban en el hotel.
Joana Biarnés decidió abandonar la fotografía cuando el director de una revista rechazó unas fotos suyas sobre una terapia de cáncer «porque no vendían». Montó un pequeño restaurante en Ibiza al que acudían famosos como Roman Polansky.
En 2012, con motivo del cincuenta aniversario de la riada del Vallès, Cristóbal Castro descubrió las fotos que había hecho Biarnés entonces y las añadió a una exposición conmemorativa.
Gracias a esta iniciativa y a la publicación del fotolibro autobiográfico «Joana Biarnés. Disparando con el corazón», su nombre regresó a la actualidad y se animó a tomar otra vez la cámara para retratar tragedias de seres humanos afectados por la enfermedad. Murió de un infarto en diciembre de 2018 en su domicilio de Viladecavalls, a los 83 años.
- TÍTULO. Moda a pie de calle
- FECHAS. Hasta el 23 de Julio
- LUGAR. Sala Canal de Isabel II. Madrid