Esta es la historia de tres que eran tres y, muy a su pesar, los tres eran buenos; a pesar de que, muy a su pesar, se empeñen en pasar la crisis de la mediana edad a escote y encerrándose, como la post nouvelle vague manda, en una casa en la afueras para mirase a la cara y sacarse las vergüenzas al aire durante unos ejercicios espirituales laicos de introspección, meditación y sinceridad, muy en boga con los tiempos que corren y (des) corren.
Ramón Paso utiliza toda su habilidad, buena mano y mejor oído, para españolizar y hacer cercano y castizo el habilísimo, verborrágico e irónico texto de Clément Michel que Gabriel Olivares recoge y convierte en un disparatado correcalles, en un carrusel sin frenos cuajado en (des) orden y (des) concierto.
Y, así, Antonio Hortelano, César Camino y Raúl Peña transfiguran el escenario en un patio del recreo donde oficiar un pilla pilla, un corro de la patata y un tu la llevas mientras, como charanga del Tío Honorio rediviva, sacan el güisqui cheli y se empujan, se pelean, se chinchan y se rabiñan.
Ni que decir tiene que el respetable no tarda, como debe ser, en perderles el respeto a esos treserantres y -entre carcajadas, comentarios y codazos- unirse a la fiesta que tiene lugar en las tablas y disfrutar –cual, con perdón, gorrinos en un maizal– de todos los equívocos y dislates; idas, venidas y entretenidas; confusiones y disparates de esta descarada, gansa y gamberra partida de desmadrado ping pong.
Pues eso, un placer. Todo un placer.
Luis de Luis. Crítico teatral
Ficha artística
Reparto: Antonio Hortelano, César Camino y Raúl Peña
Producen: El Reló Producciones y Bycicle Producciones
Dirección: Gabriel Olivares
Texto: Clément Michel
Adaptación: Ramón Paso
Ayudante de dirección: Jesús Redondo
Producción: Gaspar Soria
Escenografía y vestuario: Mario Pinilla
Iluminación: Carlos Alzueta
Diseño de sonido: José Miguel Mayoral
Fotografía: Javier Biosca
Diseño gráfico: Javier Biosca y Sergio Avargues
Vídeo y fotos de escena: Nacho Peña