Y es que lo menos que se puede decir de las actrices de la Paso Azorín es que es que son las capones de la mafia; no, desde de haberlas visto en tantas y tantas (como diría Julio Iglesias) ocasiones no me cabe la más mínima duda: son las «figlias de la sua mamma» y, con “El móvil”, Ramón Paso les ha dado la ocasión de soltarse el pelo y, desde que pisan morenas, pisan con garbo, las tablas del escenario queda exquisitamente claro que ahí están porque han venido; y han venido a pasárselo bien y el público…mejor.
Ana Azorín hace, en esta ocasión, de Maestra de Ceremonias, Gran Chambelán y Alta Comisionada para entrar y salir del texto con ironía, retranca y afecto y presentar un preciso y cronométrico correcalles – entre el absurdo y el delirio – liderado por una Ángela Peirat sublime, encantadora y eléctrica que despliega – con naturalidad y (aparente) facilidad – todos los enormes recursos de la gran cómica que es para encabezar una conga de Jalisco formada por una Inés Kerzan que destapa el tarro de las esencias para sacar a la – absurda y ensoñada – Harpo Marx que lleva dentro, una Eva Bonald que hace que brille el difícil personaje de LCH ( Linda Cabecita Hueca) que le ha tocado y una Ainhoa Quintana que hace valer el no menos difícil papel de ¿yyoquehagoaquímetida?.
Y es con “El móvil” a Ramón Paso, no contento con escribir una delicia cuajada de enredos, equívocos , suspicacias y ternura, da mus y, como buen croupier, aprieta el acelerador de la partida para imprimirla un ritmo vertiginoso – que se olvida del paso, ignora el trote y se pone al galope en cerocoma – y disfrutón para dejarse y dejarnos tan extenuados y tan felices que no queda otra que reventarse las manos, a golpe – agradecido y sincero – de aplauso.
Luis de Luis. Crítico teatral.
Ficha artística
Texto y dirección
Ramón Paso
Reparto
Ana Azorín, Inés Kerzan, Ángela Peirat, Eva Bonald y Ainhoa Quintana
Ayudante de Dirección
Blanca Azorín
Producción
Inés Kerzán, Sandra Pedraz Decker
Paso Azorín Teatro