Como una marioneta que tensa y desafía los límites que le marcan sus hilos hasta conseguir que le obedezca aparece Mariana, o, lo que es lo mismo (tanta es la intensidad y la verdad con la que le da vida) Inma González.
Con “El grito del cardo” Sandra Jiménez ha escrito una historia del final de la inocencia, la historia de una rebeldía por levantar la mirada, la historia de los recuerdos que abrasan, la de la vida que quema.
Y, para contar esa historia llena de historias por la que crepita, sigilosa, la muerte y aúllan, sibilinas, n las ausencias, Inma González – magnética y formidable – convoca al espíritu de Charles Chaplin para despertar la memoria que habita entre objetos y cachivaches, entre encajes y zurcidos, entre juguetes y cartillas, entre palabras y silencios.
Como una santa acribillada por la mala pena, como inocente acribillada de dolor e inocencia, Inma González – plena de descaro y ternura, radiante de ingenuidad y lucidez, luminosa de calma y desesperación – cuenta y no para, hechiza y no acaba y, como un duende deslumbrante y efímero se consume – palabra y palabra, mirada a mirada – hasta desvanecerse y desaparecer: eterna y fugaz.
Luis de Luis
Crítico teatral
Sala Nave 73, sábados y domingos de mayo a las 18:30 horas
Idea original: Sandra Jiménez e Inma González
Actriz: Inma González
Dramaturgia: Sandra Jiménez
Dirección: Inma González
Música original: Luis Miguel Lucas
Colaboración especial: Carmen Linares
Estudio de grabación: Moldiumsound
Técnico de sonido estudio de grabación: Rubén Ruiz Miranda
Diseño de iluminación: Raquel Rodríguez y Alicia Pedraza
Vestuario: Trajín Teatro
Ambientación de vestuario: María Calderón
Espacio escénico: Trajín Teatro
Ambientación de escenografía: Rubén Díaz de Greñu
Taller de escenografía: Agustín López y Régis Cabal
Fotos: Raquel Rodríguez
Cartel: Sandra Jiménez
Audiovisuales promoción: Sergio Milán
Producción: Trajín Teatro
Producción ejecutiva: Agustín López, Inma González
Distribución: a+ soluciones culturales