Como una previa a la diecisiete edición de la Suma Flamenca que veremos desde el 18 de octubre al 6 de noviembre 2022 en distintas sedes de la Comunidad de Madrid, la Suma Flamenca Joven es un proyecto para poner en valor artistas flamencos menores de treinta años, algunos ya muy reconocidos, tanto a nivel nacional como internacional. Una idea original de Antonio Benamargo, director artístico de ambos festivales.
Cuatro galas, en degustaciones de media hora de doce intérpretes de la guitarra de concierto, el cante y el baile.
Esta es la reseña de las dos primeras galas:
José del Tomate.
Con pedigrí de su mítico padre Tomatito, que se remonta hasta su bisabuelo Miguel Fernández Cortés El Tomate. Se presentó acompañado de la segunda guitarra de Cristóbal de Santiago y la percusión de Jony Cortés.
Presentó composiciones de su primer disco Plaza Vieja editado este año. Por tarantas, en homenaje a su tierra, Almería, por bulerías dedicadas a su padre y por tangos dedicados «al mejor de todos los tiempos, Camarón de la Isla». Un icono en la familia Tomate.
José crece de forma constante y continua como guitarrista y ahora se estrena como compositor a sus veinticuatro años. Hizo un concierto lleno de virtuosismo, un concierto que ya no es el de una promesa, sino de un guitarrista de concierto en plena madurez artística. Cierto, que como me dijo hace años un guitarrista jerezano, «la saga es importante, pero sin el trabajo personal continuo, no eres nadie».
Es el caso de José del Tomate. Ha tenido el privilegio de tener en casa un maestro de culto, con él ha ido de gira por todo el mundo desde que era un chavalín, pero en el toque de ahora de José, lo que prima principalmente es su trabajo. Un gran concierto de poco más de media hora.
Ismael El Bola
Otra media hora para el cantaor trianero de Sevilla Ismael El Bola, que estuvo acompañado por un joven y ya reconocido guitarrista, Yerai Cortés. Ismael tiene una voz flamenca llena de claridades, unos registros y una enorme técnica vocal unida a su jondura. Tiene también un primer disco, Flamenco directo, editado en 2018, cuando tenía veintitrés años.
Por soleá, por tientos y por alegrías en un concierto que supo a muy poco. Este cantaor se ha ido haciendo desde que era un niño, por festivales, con artistas de renombre que siempre le reclaman y como cantaor de adelante. Hoy, a sus veintisiete años, es un valor en escenarios mundiales. También estuvo este año en Flamenco Madrid.
Alba Heredia
De Granada, de la cueva sacramonteña de La Rocío, de la estirpe de los Maya, prima de Iván Vargas Heredia. Alba lleva el baile en sus genes. Desde ahí a sus pies, a su cerebro, a todo su cuerpo. Es de las bailaoras en las que el baile le viene desde los adentros y desde ahí se transmite y hace vibrar.
Ganó el Desplante en 2015 en La Unión. Ha bailado por todo el mundo, Europa, Asia, América, Oriente Medio y por todos los escenarios de España, peñas, tablaos y grandes teatros, incluido el Teatro Real de Madrid. Su baile seduce porque ella está seducida por su baile.
Le acompañaron los grandes Juan José Amador y Saúl Quirós al cante, la guitarra de Juan Jiménez y las palmas de Rober El Moreno.
David de Arahal
Veintidós años, guitarrista y compositor, alumno de Manolo Sanlúcar, Víctor Monge Serranito, Rafael Riqueni, José Luis Balao… Primer trabajo discográfico para concierto, Mar Verde. Uno de los cinco mejores discos de flamenco de 2021.
Le conocen y avalan artistas como Pepe de Lucía, Lole Montoya, Miguel Poveda, Estrella Morente, Antonio Canales, Rafael Riqueni, Israel Fernández, Sandra Carrasco, David El Galli…
Nos llegó al alma con su música bien construida, calma, sonoridades sinfónicas perfectas del flamenco que representa su generación milennial. Da igual lo que tocara, lo importante es el alma que dejó prendida en una Sala Verde llena hasta la bandera.
¿Qué diremos de David de Arahal, dentro de diez años? Sin duda, un gran maestro.
Teresa Hernández
De La Línea de la Concepción, es decir, de los Puertos, muy conocida en los tablaos madrileños. Estuvo acompañada por la concertista de guitarra Mercedes Luján, con la que lleva de gira desde 2021. Qué alegría, ver a dos jóvenes artistas mujeres desplegando arte del mejor.
Un guiño constante de Antonio Benamargo a las guitarristas e instrumentistas flamencas del milenio. Estamos en otra era flamenca, digan lo que digan los «puristas», con todos mis respetos para ellos.
Por tarantas, cantiñas, soleá por bulerías, fandangos, un glorioso solo de guitarra. Qué voz tan personal, tan identificativa la de Teresa. Las dos juntas un placer para el alma, la vista y el oído. Y aún faltaba lo mejor de la noche…
Gabriel Matías, bailaor de Brasil
Sencillamente deslumbrante. Nació en Portoalegre, la capital del estado brasileño de Río Grande del Sur. El predominio de su origen indígena ha tenido sin duda algo que ver en su cuerpo y en su baile. Un baile que es pura conciencia corporal, pura elegancia, pura escultura en movimiento, puro arte, pura idiosincrasia personalísima.
Ya fue premiado en Brasil en 2012 como mejor bailarín. Vino a España, estudió en el Conservatorio Superior María de Ávila, fue título superior de danza en la especialidad de pedagogía del baile flamenco. Multipremiado en España. Forma parte de la compañía de Rafaela Carrasco, tiene un primer trabajo de autor, Ellos y ya está ultimando otro, Claroscuro.
Estuvo acompañado por el cante de Eleazar Cerreduela y de Roberto Lorente. A la guitarra el gran José Almarcha.
Gabriel Matías ya es uno de esos maestros con identidad propia, su baile es pura creación individual. Y es que en él, quien crea es su cuerpo privilegiado, su enriquecedora mezcla de razas, su formación multidisciplinar y sobre todo, su genio.
Da igual por el palo que baile. Deslumbra.
