Desde siempre, el brasileño Kleber Mendonça Filho filma Recife, la ciudad donde vive.
Con archivos personales, fotos familiares, películas amateurs de horror de su adolescencia, la casa de su madre –reconocida historiadora- desde todos y cada uno de los ángulos posibles, documentos de las diferentes obras emprendidas a medida que pasaban los años para transformar el apartamento, algún ectoplasma y las apariciones de un perro que ya no vive, junto a planos de su primer largometraje de ficción, «Ruidos de Recife» (2012), también autobiográfico, este cineasta –y también crítico de cine- declara su amor y rinde un emocionado homenaje, cargado de humor y nostalgia, a los cines de la ciudad donde creció.
«Retratos fantasma» es un viaje, en distintas dimensiones, de un cinéfilo entusiasta por la capital brasileña de Pernambuco: son protagonistas el tiempo, el cine, el sonido, la arquitectura y el urbanismo de un lugar que no ha permanecido insensible a los cambios que se han producido a lo largo de todo el siglo veinte.
En un desordenado, impresionista y lúdico deambular del realizador por la ciudad y los lugares que han albergado sus emociones, esperanzas y sueños, y con la ayuda de su voz que mezcla viandantes con personajes, lugares con decorados y palabras con diálogos, Kleber Mendonça Filho nos traslada de la casa familiar, convertida en un plató que se reinventa cada vez, al barrio de Recife donde las salas de cine han ido desapareciendo para hacer sitio a nuevas aspiraciones, al tiempo que va contando la historia de las transformaciones que se han operado en Brasil en los últimos años.
Como en tantas otras ciudades del mundo, a lo largo del siglo veinte millones de personas fueron al cine en los locales del centro de Recife. Ahora, la mayor parte de ellos han desaparecido y esa zona de la ciudad se ha convertido en una especie de reserva arqueológica «de los aspectos perdidos de la vida en sociedad».
Varios de los antiguos cines –que originalmente llegaron a Recife en los años treinta, de la mano de la industria alemana bajo la égida del ministros nazi de propaganda Goebbels, para promocionar las películas a mayor gloria de Hitler- se han transformado en iglesias (anglicanas y evangelistas), siguiendo la misma tendencia que en sus orígenes, aunque lo que ahora promocionan es el evangelismo político que desde los años ochenta está reemplazando en Brasil al antiguo catolicismo; tendencia reforzada durante el gobierno de Bolsonaro.
Todo esto, además de muchas emociones y bastante nostalgia, lo encontramos en «Retratos Fantasma[1]», un interesante puzle compuesto por retazos de anteriores películas, recorridos callejeros, personajes que hablan con la mirada y escenas de carnaval –según alguien que entiende «los mejores carnavales del mundo son Niza, Río y Recife»- que es una declaración apasionada de amor al cine y a los cines que alimentaron los sueños de nuestra infancia.
- «Retratos Fantasma» se estrena en la cartelera madrileña el viernes 3 de octubre de 2023.