El actor neozelandés Rusell Crowe (Oscar 200 al Mejor Actor por Gladiator, El exorcista del papa, Robin de los bosques, Los miserables , La momia, Padres e hijas, La liga de la justicia de Zack Snyder), repite en la direción de largometrajes con «Poker face», un thriller policíaco psicológico de factura muy americana sobre un multimillonario que organiza una partida de poker para los viejos amigos.
La velada da un giro cuando empiezan a revelarse secretos guardados desde la infancia. El complot de venganza organizado por el riquísimo protagonista se viene abajo cuando en la mansión acristalada sobre el mar irrumpe inesperadamente una banda de ladrones.
Se trata de la segunda incursión de Russell Crowe en la realización, tras «El maestro del agua» (2014), con la que cosechó varios premios, basada en una historia de Stephen M. Coates.
Prevista, en principio para ser dirigida por Gary Fleder en Miami, «Poker Face» se rodó finalmente en Sidney y cuenta con un reparto en el que participan Liam Hemsworth (Los juegos del hambre, Independece Day 2, Paranoia), el menor de un clan neozelandés de atractivos actores, la española Elsa Pataky (Fast and Furious, El infierno de Malone, Interceptor, Thor: love and Thurner), en el papel del croupier de la millonaria partida de poker y RZA, miembro fundador de la banda Wu-Tang Clan, junto a Aden Young, Steve Bastoni, Daniel MacPherson, Brooke Satchwell, Paul Tassone, Matt Nable, Benedict Hardie, Molly Grace, Jacques Thompson y Jacqueline McKensie.
En «Poker Face[1]», Russell Crowe interpreta el personaje del millonario Jake, de 57 años, quien afectado de un cáncer de páncreas que está acabando con su vida decide organizar una última partida de poker con la pandilla de amigos de la infancia. Como en la vida misma, con algunos ha seguido manteniendo la amistad mientras que otros se fueron alejando; entre ellos hay de todo, desde un empresario que ha quebrado a un ministro.
Los niños que, lejos de las miradas adultas, ayer saltaban en las cascadas de los ríos, con el tiempo se convirtieron en profesionales y hasta en ·dioses del poker, llegando a inventar un algoritmo que puede calcular los siguientes movimientos (no solo de los jugadores, sino incluso de los Estados del mundo).
Detrás de la partida de poker, Jake esconde un plan maquiavélico para saldar antiguas deudas vengándose de algunos de sus invitados. Un plan que vendrá a trastocar la banda de ladrones que irrumpe en el relato y que era lo único que faltaba en esta historia predecible.
Historia de amor y amistad que se vio interrumpida y alterada por la pandemia, en «Poker face» la partida multimillonaria (los ganadores se llevarán cincuenta millones de dólares; todos, por el simple hecho de asistir, han sido obsequiados con espléndidos coches de las marcas punteras del mercado) es poco más que el título. Lo demás son las relaciones entre los amigos, la excitante velada regada con los mejores vinos, la relación del millonario moribundo con su ex mujer y su hija…
«El poker es una paráfrasis exacta de la vida humana, hecha de buenas y malas opciones, de esquemas a aplicar y de acciones que planeamos para nosotros mismos pero que afectan a quienes nos rodean, lo queramos o no (es una de las leyes de Newton)». (crast.net).
«Poker face» nos lleva a reflexionar sobre el control que tenemos de nuestras vidas y nuestras opciones; cuando creemos poder controlarlo todo y en realidad jugamos con las cartas que nos han tocado. Cuando ganamos nos sentimos campeones: «Temprano o tarde el juego acabará, la ola alcanzará al río, pagaremos la última factura, caerá la última lágrima de nuestros ojos, nos dormiremos y no quedará nada de nosotros».
Quedarán los amigos, quedarán los amores, y esas cartas que desvela el croupier y que son toda nuestra vida, compuesta no solo de nombres, también de cifras, amantes, personas cercanas y otras menos…
«Poker Face» no es una gran película, está incluso plagada de errores de novato, como querer contar demasiadas cosas en poco tiempo -«parece una película escrita por alguien que nunca escribió un guión antes, es un torpe desorden de principio a fin» (thepressfree,com)- pero está «cargada de mensajes y alegorías, de pinceladas de colores, sonidos y emociones…».
- «Poker face» se estrena en Madrid el viernes 13 de enero de 2023