No es un programa electoral o al menos no lo es todavía. Se trata de un contrato, un compromiso que Podemos Leganés quiere alcanzar con las entidades que agrupan a la ciudadanía del pueblo. Una nueva forma de acercarse a los ciudadanos que el partido morado quiso hacer extensiva a los propios medios de comunicación en una convocatoria de prensa que decidió convertir en un desayuno que sirviera para volver a retomar el contacto con la prensa tras los dos largos años de relaciones distanciadas por los efectos de la pandemia.
Las dos concejalas de Podemos desgranaron ante los medios presentes las treinta y ocho medidas contenidas en su «Contrato Social». Se trata de medidas concretas que han sido acordadas con las asociaciones de vecinos en el caso de los barrios, con los trabajadores del Ayuntamiento y los ciudadanos en el caso de los servicios públicos y con cada unos de los sectores ciudadanos en el caso de la cultura, el deporte, y la ciudadanía en general.
El compromiso de Podemos afecta a aspectos tan distintos como las necesidades concretas de los barrios (la recogida neumática de basuras en Zarzaquemada, las aceras de la circunvalación del barrio de Vereda de los estudiantes o la rehabilitación de la piscina Solagua en Leganés); o la remunicipalización de los servicios privatizados o la contratación del personal necesario en la cada vez más maltratada escuela municipal.
Cuando se pregunta a los responsables del partido por la financiación de esos compromisos, responden que aun no esta totalmente definida pero que los superávits de los pasados años, en los que la inversión municipal ha sido tan escasa que no se han gastado los presupuestos, bastarían para pagar todos los proyectos y evitar lo que está ocurriendo con el presupuesto actual aprobado este jueves, que esta desviando dinero inicialmente presupuestado para inversión social a volver a reasfaltar muchas de las calles que ya lo fueron este verano o a la peatonalización de nuevas calles del centro.
Todas las propuestas llevan fechas de ejecución concreta y muchas de ellas ya fueron aprobadas en su día por el pleno municipal sin que el gobierno de Santiago Llorente haya hecho nada por llevarlas a la practica, algo que ya es una característica propia del desempeño del actual equipo de gobierno.
