El Parlamento Europeo confirmó este martes 14 de febrero de 2023 los nuevos objetivos de reducción de emisiones de CO2 para los turismos y vehículos comerciales ligeros nuevos, una de las medidas del paquete «Objetivo 55».
Con 340 votos a favor, 279 en contra y 21 abstenciones, los eurodiputados han aprobado el acuerdo alcanzado con el Consejo por el que se revisarán las normas en materia de emisiones de CO2 de los turismos y furgonetas nuevos. De este modo, la industria automovilística se alinea con la mayor ambición climática de la UE.
La nueva legislación traza la senda para reducir a cero en 2035 las emisiones de CO2 de turismos y vehículos comerciales ligeros nuevos. Habrá también objetivos intermedios de reducción de emisiones para 2030, del 55 por ciento para los automóviles y del 50 por ciento para las furgonetas en comparación con el nivel de 2021, y como una media para el conjunto del parque de vehículos nuevos de la UE.
Otras medidas clave que contempla el Reglamento:
La Comisión presentará, a más tardar en 2025, una metodología para evaluar y comunicar datos sobre las emisiones de CO2 durante todo el ciclo de vida de los automóviles y furgonetas vendidos en la UE. Cuando proceda, esta metodología irá acompañada de propuestas legislativas.
Como tarde en diciembre de 2026, la Comisión estudiará la diferencia entre los valores límite de emisión y los datos reales de consumo de combustible y energía, informará sobre una metodología para ajustar las emisiones concretas de CO2 de los fabricantes y propondrá unas medidas de seguimiento adecuadas.
Los fabricantes con una producción reducida (entre 1000 y 10.000 automóviles nuevos o entre 1000 y 22.000 furgonetas nuevas al año) podrán beneficiarse de una exención hasta finales de 2035. Los que declaren menos de mil vehículos nuevos al año seguirán estando exentos.
El actual mecanismo de incentivos para vehículos de emisión cero o de baja emisión recompensa a los fabricantes que venden más vehículos de este tipo con unos objetivos de reducción de emisiones de CO2 más bajos. Se trata de los vehículos con emisiones entre cero y 50 g de CO2/km, como los vehículos eléctricos e híbridos enchufables con buen rendimiento.
Este mecanismo se adaptará para ajustarse a las expectativas de venta. De 2025 a 2029, el índice de referencia de los vehículos de emisión cero o de baja emisión queda fijado en el 25 por ciento para las ventas de automóviles nuevos y en el 17 por ciento para las furgonetas nuevas. A partir de 2030, este incentivo desaparecerá.
Cada dos años, a partir de finales de 2025, la Comisión publicará un informe para evaluar los avances hacia una movilidad vial sin emisiones.
El ponente, Jan Huitema (Renew, Países Bajos), ha declarado que «este reglamento impulsará la fabricación de vehículos de emisión cero o de baja emisión. Incluye una revisión ambiciosa de los objetivos para 2030 y 2035, esencial para alcanzar la neutralidad climática en 2050 a más tardar. Estos objetivos aportan claridad a la industria automovilística y estimulan la innovación y la inversión entre los fabricantes de coches. Comprar y conducir coches limpios será más barato, y aparecerá antes un mercado de segunda mano. La conducción sostenible estará por fin al alcance de todos».
Tras la votación final en el pleno, el texto tendrá que ser aprobado formalmente por el Consejo. A continuación, se publicará en el Diario Oficial de la UE.
El 14 de julio de 2021, la Comisión presentó, dentro del paquete «Objetivo 55», una propuesta legislativa para revisar las normas en materia de emisiones de CO2 aplicables a los turismos y vehículos comerciales ligeros nuevos.
La propuesta tiene por objeto contribuir a los objetivos climáticos de la Unión para 2030 y 2050, beneficiar a la ciudadanía e impulsar la innovación en tecnologías de cero emisiones.