
La región del Mar Negro, llamada también Ponto, tiene una costa escarpada y de difícil acceso, no obstante, los griegos comienzan en el siglo octavo antes de Cristo la colonización de estos territorios, y fue Mitrídates I quien configuró un Estado helenístico de cultura y lengua griega en esta zona de Anatolia, desde la que luchó contra el Imperio romano.
El dramaturgo Racine, en el siglo diecisiete, escribe una tragedia sobre la vida del rey Mitrídates VI Eupator, rey de Ponto, en el Mar Negro.
¿Por qué Racine se inspira en este rey?
Porque Mitrídates se suicida ante la traición de su hijo y los enredos y ocultamientos amorosos de su reinado, además de la derrota romana.
¿Y cómo Mozart podía comprender una historia tan llena de pasiones y falta de lealtad, cuando apenas tenía catorce años, y cómo escribe la ópera encargada por el conde Firmian, gobernador de Milán, en 1770, en Italia, ante el asombro y la sorna de músicos y cantantes?
Mozart tiene elementos para componer Mitrídates, rey de Ponto, tiene un libreto del italiano Vittorio Amadeo Cigna-Santi, que está inspirado en la tragedia de Racine y aportes de conocimientos musicales que el joven empieza a ver en Italia.
La ópera se estrenó en el Teatro Regio Ducal de Milán el 26 de diciembre de 1770, con gran éxito.
Sin embargo, es una ópera muy poco representada, desde aquella época solo se interpretó en Salzburgo en 1977.
Tendremos la ocasión de verla en Madrid en el Teatro Real, entre el 23 de marzo y el 9 de abril 2025, en diez funciones, en una nueva versión, en coproducción con la Ópera de Frankfurt y el Gran Teatre Liceu de Barcelona.
Mozart, escribió esta ópera estando en gira por Italia con su padre, en su primer viaje a la península, de tres que hizo. Era un adolescente, y conoce al músico checo Josef Myslivecek, quien trabajaba en la ópera La Nitteti, en Bolonia, y así tuvo acceso a la partitura de su amigo, que influyó en Mozart en los conceptos compositivos y motivos musicales que aplicó en su obra.
El tema de Mitrídates era difícil, por ser una historia de la antigüedad clásica, por tener como conflicto dramático, no muy representado, la traición del hijo al padre. Mozart viajaba con su progenitor y este, mientras atendía sus asuntos para conseguir un mejor empleo, también cuidaba que su hijo tuviera una educación musical esmerada, considerando la escuela italiana, y observaba a su vez, la posibilidad de encargos de nuevas composiciones.
Sin duda Mozart, al componer la ópera de Mitrídates y sus arias, debe haber pensado en el tema de la traición al padre, de ahí que sus recitativos tengan tanta profundidad, además de las influencias y los conocimientos musicales que ya había adquirido.
Aún hoy, la traición filial es un tema difícil y poco tratado, tanto en la operística como en el teatro, pero su estancia en el Palacio del conde Pallavicini, donde se alojaron mientras su padre mejoraba de una dolencia en la pierna, debe haber facilitado su creación, por el ambiente privado y de recogimiento.
La ópera sucede cerca del puerto de Crimea, en el año 63 antes de Cristo, durante el conflicto entre Roma y el Ponto. Mitrídates sufre una derrota en la batalla y es dado por muerto. Esta noticia se comunica a los hijos: Farnace y Sifare, y a Aspacia la prometida de Mitrídates. Pero el monarca no había muerto y este equivoco desencadena nuevos equívocos y desenmascara las pasiones ocultas y los intereses personales.
La situación de infidelidad de sus hijos junto con la pérdida de su honor en la batalla y su cautiverio, llevan a Mitrídates al suicidio. Sin embargo, antes de morir, como padre, perdona a sus hijos y a su novia y bendice sus respectivas parejas. El amor filial se impone a todas las traiciones y arrebatos amorosos. Los hijos y sus mujeres, ante esa actitud, se comprometen a liberar al mundo de Roma.
Para un adolescente es, sin duda, una historia muy intensa, donde aparecen el tema del poder, la responsabilidad del mandato, el enemigo en acecho, el amor, el entrecruzamiento de parejas, los deseos ocultos, la guerra, el dominio, el deber monárquico y el amor filial. Es todavía un misterio la precocidad y manejo musical de Mozart que se pone de manifiesto en esta temprana obra.
El Teatro Real propone una puesta en escena de Claus Guth donde se articulan estos dos mundos: el drama de un hombre poderoso, traicionado por sus hijos y el impacto en el inconsciente de los protagonistas donde aflora un trasfondo edípico.
La Orquesta Titular de Teatro Real cuenta con la dirección de Ivor Bolton, especialista mozartiano, la escenografía es de Christian Schmidt, el vestuario de Ursula Kudrna y la coreografía de Sommer Ulrickson.
Los siguientes cantantes cubren los roles, de Mitrídates: Juan Francisco Gatelli y Siyabonga Maqungo; Aspasia: Sara Blanch y Ruth Iniesta; Sifare: Elsa Dreidig y Vanessa Goikoetxea; Farnece: Franco Fagioli y Tim Mead; Ismene: Marina Monzo y Sabina Puértolas; Marzio: Juan Sancho y Jorge Franco; y Arbate: Franco Klisovic.
Como siempre se ofrecerán actividades culturales, relacionadas con la ópera, entre ellas, la visita exclusiva al museo Arqueológico Nacional: «Tocando la historia: Mitrídates frente a Roma».
Para más información visitar la página web del Teatro Real