Paula Maddox
«La historia de un país no es otra cosa que la suma de las historias individuales de sus ciudadanos. Y la situación que estamos atravesando merece un reconocimiento a los profesionales que continúan trabajando para que todos podamos seguir adelante en nuestras casas y superar esta crisis» cuenta Jorge Escohotado, director de Memoralia.
Bajo el lema Porque toda vida merece ser contada, Memoralia, empresa especializada en la elaboración de biografías por encargo, ha lanzado una iniciativa en redes sociales para buscar las mejores historias de héroes anónimos.
«Nuestras estanterías se llenan de libros de gente que no conocemos y a los que conocemos nunca les hemos dedicado un libro». Por ello, desde Memoralia han puesto en marcha el libro Los héroes del COVID-19, que recogerá testimonios de todos los colectivos involucrados en la pandemia: sanitarios, policías, farmacéuticos, trabajadores de supermercados, limpieza, militares, transportistas, periodistas u operarios de la red de comunicaciones.
«Creemos que hay muchas hazañas cotidianas que, juntas, hacen una gran victoria. Y este libro tan especial permitirá plasmar esta pequeña pero muy importante parte de la historia de nuestro país», señala Escohotado.
Para formar parte del libro, los participantes deberán enviar todo el material (fotos, vídeos y relatos) a [email protected] con fecha límite del 17 de mayo de 2020.
Una vez esté listo, los participantes recibirán un ejemplar de la biografía y después se pondrá a la venta. Así mismo, la recaudación se donará a diferentes fundaciones para ayudar a las personas más afectadas por la COVID-19.
Testimonios conmovedores
El señor Sebastián Ledesma es uno de los héroes de este libro. Hace unos años ya que dejó su profesión de sastre, un trabajo que llevó a cabo durante décadas en La Zarza (Badajoz).
Sin embargo, con la llegada de la pandemia, sus manos y su máquina de coser se volvieron a poner en marcha por un motivo muy distinto: fabricar mascarillas y batas de manera altruista para ayudar.
Desde que comenzó con este trabajo en su taller, Sebastián ha fabricado más de 60 mascarillas y ha cortado más de 70 batas, que después han cosido otras vecinas de esta localidad. De esta manera, este grupo de personas ha ayudado a las familias de la localidad extremeña y a los sanitarios del Hospital de Mérida.
Mar Sánchez, médico de familia de atención primaria desde hace más de 20 años en la provincia de Salamanca, también forma parte del libro.
«La primera palabra que se me viene a la boca es miedo. El miedo del lunes 16 de marzo a las 8 de la mañana cuando nos citaron a la totalidad de la plantilla para una reunión. Todo era confusión. Había que hacerles entender a nuestros pacientes el peligro que se nos echaba encima. Y, sobre todo, teníamos que enseñarles a enfrentarse a un nuevo virus que ninguno conocíamos», cuenta en su biografía.
«Lo peor llegó cuando fallecieron algunos compañeros… Creemos que lo tenemos todo, pero de un día para otro nuestros planes se destruyen y nos vemos en la cuerda floja», confiesa.
Otra historia que recogerá el libro es la de Rosa María Pérez, enfermera del Hospital Río Carrión de Palencia. «Me gustaría pensar que los sanitarios nunca más volveremos a ser el saco de los golpes de alguna parte de la sociedad insolidaria, que no volveremos a sufrir agresiones físicas ni verbales, pero desgraciadamente no creo en los milagros», cuenta.
Por su parte, Rosa espera que «cuando la marea blanca salga a la calle, no sea solamente blanca, sino que hayamos aprendido que la sanidad es de todos y la responsabilidad también».
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