Los médicos madrileños que propaguen o favorezcan comportamientos «contrarios a la ética y a la ciencia» en torno a la pandemia de la COVID-19, podrán ser expedientados por el Colegio Oficial de Médicos de Madrid (Icomem), que, además, denunciará ante las autoridades competentes «cualquier comportamiento sectario o negacionista» por parte de los colegiados.
Así lo anunció este miércoles la junta directiva del Icomem a través de un comunicado, emitido ante lo que considera una «proliferación» de este tipo de posturas negacionistas entre sus profesionales, y al entender que la actitud y los mensajes de estos médicos negacionistas, «contrarios a la evidencia científica disponible», constituyen una «grave irresponsabilidad y un peligro para la salud pública», informa Servimedia.
De este modo, avisó de que evaluará los posicionamientos negacionistas efectuados por algunos profesionales médicos sobre la pandemia, la validez de las pruebas PCR y las medidas preventivas, y denunciará «cualquier comportamiento sectario o negacionista».
El Icomem considera que estas conductas también violan las normas deontológicas de la profesión médica, por lo que, además, todos los médicos que «aconsejen» comportamientos de riesgo para la población o la salud pública, podrán ser evaluados desde el punto de vista científico y ético por las distintas comisiones que regulan la práctica profesional.
Asimismo, el Icomem advirtió de que denunciará «actitudes permisivas para cualquier manifestación que conlleve riesgos de salud para las personas que a ellas asistan», porque «los colegios profesionales son corporaciones de derecho público y deben velar por la salud de la ciudadanía como expresión de la práctica médica».
Finalmente, recordó que el «deber» de los profesionales médicos es trasladar a la población «un mensaje de responsabilidad y no dar credibilidad a estas teorías pseudocientíficas», convencido de que el compromiso de los ciudadanos con el mantenimiento de las normas dictadas por las autoridades sanitarias es una «herramienta imprescindible para protegernos de la trasmisión de la COVID-19».
