Marifé Sastre[1]
La Comunidad de Madrid es el ejemplo vivo de políticas neoliberales que, al igual que en otros países como Reino Unido, han sido y son un fracaso pues conducen a los ciudadanos a una situación límite al producirse un desmantelamiento del sistema público, que es fundamental para equilibrar desigualdades y con ello tener una sociedad verdaderamente igualitaria.
Este neoliberalismo está convirtiendo a nuestra región en una sociedad profundamente desigual, separada incluso geográficamente, con enormes diferencias entre los pocos que más tienen y el resto de la gran mayoría de la población madrileña.
Desde CCOO de Madrid defendemos que para hacer la transformación de nuestra Comunidad debe ser esencial la defensa de lo público frente al neoliberalismo brutal a la que este gobierno regional está sometiendo a sus ciudadanos.
Se debería en cambio sentar las bases de un modelo alternativo, capaz de reducir las desigualdades sociales y territoriales que impregnan nuestra región, haciendo que estas diferencias no se conviertan en una desigualdad estructural con brechas vitales intolerables.
Las políticas fiscales en la Comunidad de Madrid han estado dirigidas a reducir los impuestos a los contribuyentes que más tienen, recurriendo a reducciones indiscriminadas en las bases imponibles y los tipos de tributación en los impuestos gestionados a nivel autonómico.
Medidas como la eliminación del impuesto de patrimonio y del impuesto de donaciones ysucesiones, son las que agravan y perpetúan la desigualad.
Tributación justa
Nuestra propuesta, trasladada repetidamente al gobierno regional del PP, es recuperar una tributación justa que permita a esta Comunidad disponer de recursos propios y sin depender de una manera tan elevada de los fondos estatales.
Madrid se ha convertido en la comunidad autónoma líder en gestión privada y concertada de hospitales, escuelas o residencias, en detrimento de la gestión directa de estos servicios públicos tan esenciales. Medidas dirigidas al beneficio de fondos privados.
Desde CCOO de Madrid, defendemos servicios públicos para toda la ciudadanía. Esto pasa por recuperar el gasto en Atención Hospitalaria; duplicar el gasto en Educación Pública para que prevalezca este sistema educativo; reorientar los recursos destinados a los servicios residenciales para personas mayores hacia la red de titularidad pública, siendo gestionados directamente por la Comunidad de Madrid.
Hay que poner en valor, con inversión y recursos públicos adecuados y suficientes, el sector de los «Cuidados» que son el pilar más importante del estado de bienestar.
La Comunidad de Madrid ha basado su modelo de crecimiento en la atracción de inversión financiera y de sedes corporativas de grandes grupos empresariales, a través de una liberalización extrema de la economía madrileña.
Esta enorme concentración de poder económico, fundamentalmente en algunos distritos de la Ciudad de Madrid, produce una realidad dual, la de las grandes multinacionales de servicios por un lado y, la del tejido productivo local por el otro.
Se trata, además, de un modelo caduco, incapaz de dirigir la transformación de la economía hacia los sectores de mayor productividad y de afrontar los retos de la transición verde y la digital.
Desde CCOO de Madrid, creemos en la necesidad de una economía diversificada y resiliente, reactivando el Plan Industrial 2025-2029, con el fin de alcanzar los objetivos de empleo y producción industrial allí definidos, y terminar de culminar las transformaciones pendientes del plan industrial anterior y el desarrollo de medidas relativas al cambio climático, transición verde y economía circular.
Desigualdad territorial
La polarización y desigualdad de la sociedad madrileña tiene también una dimensión territorial. La concentración de la actividad económica en unas pocas áreas de la Comunidad de Madrid (o, incluso, de la propia Ciudad de Madrid) y la insuficiente regulación de los mercados del suelo y de la vivienda ha conducido a una desvertebración de la región madrileña y al éxodo de gran parte de la población, especialmente jóvenes, hacia barrios y ciudades alejados de sus centros de trabajo.
Desde CCOO de Madrid, defendemos la cohesión territorial de la Comunidad de Madrid. Proponemos la creación de un Fondo para el reequilibrio regional, con el fin de fomentar la inversión económica en los municipios de la región de Madrid con menor renta per cápita, introduciendo planes de inversión con criterios orientados al reequilibrio territorial en las dotaciones de servicios públicos, fomentando iniciativas de colaboración interadministrativas y con los agentes sociales, con el fin de favorecer iniciativas de desarrollo económico de base comarcal y con creación de empleo estable y de calidad.
Se necesita la elaboración de una Ley de Vivienda que defina intervenciones valientes y decididas que reduzcan los elevados costes, como pueden ser la limitación de apartamentos turísticos, penalización de la tenencia de pisos vacíos, congelación y regulación de alquileres, control de los fondos buitres, marcar porcentajes de construcción de vivienda Publica en compra y alquiler, etc.
Es imprescindible recuperar el Consejo Económico Social de la Comunidad de Madrid, con el fin de asegurar la participación de los agentes sociales en la elaboración de las políticas regionales que faciliten una verdadera proyección de vida de los ciudadanos en todos los territorios de la Comunidad.
Hay que alcanzar un acuerdo para la planificación de una estrategia para el empleo en la comunidad de Madrid, que no podrá hacerse de forma eficaz sin contar con un diagnóstico claro de lo que ocurre en la región. Es necesario hacer un análisis objetivo de los problemas estructurales y endémicos que en este momento lastran las vidas de muchas personas que desean vivir y hacer su proyecto de vida en Madrid y no pueden por las erróneas políticas que desde el gobierno de PP madrileño se plantean.
Las medidas que se están planteando fuera del diálogo social, no son más que parches temporales que solamente sirven para un determinado momento. No están profundizando en los problemas estructurales que desde hace años se han cronificado y no se les da la solución que se necesita.
El empleo que se crea y que mes a mes estamos cuantificando, no es más que un espejismo, ya que el gobierno de la Comunidad de Madrid propicia únicamente un empleo a la carta del periodo de tiempo sin perspectiva ni proyección de futuro.
Un empleo muy unido al sector servicios que, en múltiples ocasiones, queda al albur de un contratiempo, destruyéndose fácilmente el empleo, sin reacción alguna para preservarlo. Es fundamental que otros sectores de producción deban ser tenidos en cuenta a la hora de hacer políticas activas de empleo.
El empleo de alta cualificación es deseable, pero no es el único con el que se debe trabajar. Hay una importante concentración de desempleados de larga duración con un grave problema para reconvertirse en empleados idóneos para las empresas, y debemos darles respuesta.
Hay que revisar la labor de las oficinas de empleo como una de las herramientas menos utilizadas para canalizar las necesidades de las empresas y la disponibilidad de las personas desempleadas. Esto es motivo de que un porcentaje muy pequeño de empresas acudan a las oficinas de empelo como herramienta prioritaria para la búsqueda de personas trabajadoras.
La conversión de las oficinas de empleo en una herramienta útil, pasa por un uso adecuado como una verdadera intermediación entre las empresas y las personas desempleadas, adecuando la funcionalidad para la actividad que se demanda.
El sistema educativo de la Comunidad de Madrid, no está siendo lo ágil que debe de ser en cuanto a la adaptación de los cambios que se están produciendo en el mercado laboral, con la oferta de formación en los centros educativos, retrasando de esta forma la incorporación de la formación demandada por el mercado laboral.
Panorama oscuro
Con este diagnostico: políticas neoliberales que conducen al desmantelamiento de lo público, rebajas en los impuestos a los más pudientes, sin plan industrial que reme por el cambio en el modelo productivo, con un problema estructural en el precio de la vivienda, con un sector de cuidados abandonado en las manos del interés privado, con un fomento del empleo mayormente dirigido al sector servicios, sujeto a los cambios imprevisibles del mercado que lo hace precario e inestable y con escaso, sino nulo, dialogo social, el panorama de esta Comunidad se nos presenta oscuro.
Desde CCOO Madrid no nos demos por vencidos y seguiremos luchando por revertir esta corriente. Desde lo concreto, trabajaremos para que el impacto de estas políticas se pueda mitigar, mientras no se modifiquen.
- Marife Sastre es responsable de Trabajo y Nuevas Realidades de CCOO Madrid