La presidenta de Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha considerado el uso obligatorio de mascarilla en todos los espacios públicos ante el reciente repunte de casos por contagio de COVID-19.
Aunque es inevitable que haya rebrotes, lo importante es que reaccionemos dado que el virus estará aquí uno o dos años. Si para ello, fuera necesario el uso obligatorio de mascarilla, se haría, ha añadido.
Ese uso obligatorio será para todas aquellas personas mayores de seis años de edad, salvo las excepciones que vienen recogidas en la normativa de la nueva normalidad implementada por el gobierno central.
Las mascarillas serán obligatorias en la calle, en espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado siempre que tenga uso público, incluso, aunque se pueda mantener la distancia de seguridad, incluidos los paseos por el campo. Las multas por incumplirlo oscilarán entre los cien y los seiscientos euros.
El Ejecutivo regional añade, «la movilidad y los temas de seguridad ciudadana no les competen a las autonomías», por lo que quiere estudiar con Delegación una estrategia con las competencias en Seguridad que tiene el Ejecutivo central para así poder «confinar o cerrar temporalmente municipios».
Por ello, la comunidad ha mostrado su inquietud por este asunto y prevé hacer campañas de concienciación para que la población comprenda que el virus no se ha ido y sigue con nosotros, ha añadido la presidenta Ayuso.