La Federación de Enseñanza de CCOO Madrid informa del éxito de la primera jornada de huelga en Escuelas Infantiles privadas y públicas de gestión indirecta, convocada por CCOO en todo el Estado, que tiene como objetivo exigir a la patronal el desbloqueo de la negociación colectiva.
En el 13 Convenio colectivo de centros de asistencia y educación infantil, la patronal insiste en querer perpetuar la situación de absoluta precariedad en la que se encuentran las más de quince mil trabajadoras que en Madrid se dedican a la educación en la etapa educativa de cero a tres años.
La secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO de Madrid, Isabel Galvín, junto con trabajadoras de Escuelas infantiles, han expuesto la dramática realidad del sector.
«A la precariedad salarial de las profesionales, cuyos salarios apenas alcanzan el Salario Mínimo Interprofesional (1028 euros) se suma la excesiva carga horaria y el retroceso en derechos a condiciones laborales, que priman el beneficio económico a las prioridades educativas y que distan mucho de las de otros sectores educativos», denuncia Galvín.
Los servicios mínimos impuestos por la Comunidad de Madrid, son totalmente abusivos y vulneran el derecho a huelga de las trabajadoras. En algunas Escuelas Infantiles han sido obligadas a acudir el 97 por ciento de la plantilla. Además, CCOO señala que el Ayuntamiento de Madrid amplió a última hora estos servicios mínimos, sin negociación ni consulta previa, al personal de cocina y limpieza.
Las representantes del personal de las Escuelas Infantiles han exigido en rueda de prensa que las administraciones controlen y fiscalicen la gestión de las empresas adjudicatarias, ya que, en la actualidad, no se penaliza a los empresarios cuando las incumplen.
Tal y como señalan estas representantes: «las entidades gubernamentales no pueden ser cómplices y perpetuar este ciclo de precariedad en sus licitaciones».
Esta misma semana cientos de trabajadoras del Grupo Kidsco, empresa que gestiona Escuelas Infantiles en todo el Estado, están participando en paros para denunciar la demora e impago de sus nóminas.
«Nuestra vocación no paga las facturas», han señalado las trabajadoras. Con esta movilización, además de denunciar el bloqueo de la patronal en la negociación del Convenio, se pretende visibilizar la importancia de la etapa de cero a tres años, su dimensión educativa, el valor social que tiene esta actividad profesional, altamente feminizada, que se ocupa de nuestros niños y niñas, y de poner las bases del sistema educativo de nuestra sociedad.
«Llamamos a la movilización conjunta de toda la comunidad educativa, incluidas las familias, ya que la precariedad de las trabajadoras repercute directamente en el alumnado y su entorno más próximo», resume Galvín.