Hasta ahora La clasificación del lipedema se ha hecho según dos conceptos:

  • 1. La distribución de las zonas afectadas por el lipedema. Tipos de lipedema.
  • 2. La cantidad de grasa en las zonas afectadas. Estadios del Lipedema.

La clasificación convencional del lipedema no siempre está relacionada con el dolor en las piernas ni con el pronóstico de su evolución. Hay además tipos que no están descritos, como por ejemplo el que afecta principalmente desde las rodillas a los tobillos

Desde la fundación del Instituto del Lipedema en 2007, hemos desarrollado una nueva clasificación basada en el inicio y la evolución de la enfermedad, que está más correlacionada con el dolor, la evolución de la enfermedad y la salud del paciente. 

Esta clasificación permite personalizar el tratamiento y valorar mejor el pronóstico. Nuestra clasificación no se ha descrito en otros trabajos científicos, ya que es resultado de la investigación realizada por el Instituto del Lipedema.

LIPEDEMA TIPO A: (Allen y Hines clásico)

El lipedema tipo A, aparece con la pubertad (13 a 18 años) , se localiza en sus inicios en los muslos y no suele ser doloroso. La paciente tan solo nota que usa una talla de pantalón mayor que sus amigas.

Es muy frecuente que la paciente sea diagnosticada de celulitis (el nombre correcto según la OMS es Cellulite), los tratamientos que se le indican para la celulitis fracasan y la paciente observa que el aumento de grasa en los muslos continua incluso con dietas y ejercicio.

Ya con más años (27 a 35 generalmente) el incremento de la masa grasa empezará a afectar a la mitad inferior de la pierna, las pantorrillas. Empezará a notar tirantez y molestias, en la zona situada sobre los tobillos, al final del día, aumentando con la menstruación y con el calor. Además de la tirantez podrá observar aumento del volumen en esta zona sobre los tobillos. Esta tirantez, congestión y a veces aumento de volumen, suele desaparecer durante la noche.

Después (37 a 45 años) el lipedema producirá aumento de volumen en toda la pierna de manera progresiva, igualmente el dolor y congestión también podrán aumentar. Será además posible que empiece a notar incremento de volumen en en los brazos, en su zona posterior, y además descolgamiento de esta zona.

Sin embargo, habitualmente el lipedema, hasta el comienzo de la menopausia (47 a 52 años), no afectará a la mitad superior del cuerpo.

LIPEDEMA TIPO B: (Moncorps Rusticanus)

Este tipo de lipedema, es frecuente que tenga su comienzo antes de la pubertad o en sus primeros años.

En muchas ocasiones, la paciente recuerda que con 8 o 9 años, y antes de su primera menstruación, ya notaba que la zona por encima de los tobillos estaba ligeramente engrosada, adoptando incluso aspecto tubular. Si usaba calcetines cortos o botas altas, podían dejar marca en esta zona, sobre los tobillos y notaba tirantez en esta zona.

Con la llegada de la menstruación, en este tipo de lipedema, el tobillo, y en ocasiones toda la mitad inferior de la pierna,  adoptan forma tubular, sobre todo los días de la menstruación o calor. El dolor, la congestión y la molestia, en la parte baja de la pantorrilla y sobre los tobillos, empiezan ya con 12 a 14 años, antes que en el lipedema tipo A.

Dado que la afectación está presente desde la niñez, no es infrecuente que este tipo de lipedema produzca alteraciones psicológicas, en ocasiones el complejo de tobillo grueso durante la pubertad, podrá dar lugar a daños psicológicos, especialmente Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA).

Con el paso de algunos años (18-26 años), pero no siempre, el lipedema ascenderá y afectará a los muslos, confundiéndose con el lipedema tipo A. Pero los daños venosos y linfáticos desde la niñez, harán que el dolor y congestión sobre los tobillos sean mayores que en el lipedema tipo A.

Al igual que el lipedema tipo A, con los años podrán afectarse los brazos y poco antes o ya en la menopausia el lipedema afectará por encima de la cintura. Es muy frecuente que la mujer delgada con lipedema pertenezca a este tipo de lipedema.

LIPEDEMA TIPO MIXTO A-B.

Este tipo de lipedema reúne las características del lipedema tipo A y tipo B. Suele empezar en la niñez, pero al afectar a toda la pierna, la paciente refiere que ella ha tenido las “piernas gorditas” desde la infancia. La pubertad hará que toda la pierna se afecte, no solo la mitad inferior o superior.

Suele evolucionar hacia la obesidad más rápidamente que el Lipedema A o el B, con lo que la afectación por encima de la cintura no es infrecuente que ocurra muchos años antes de la menopausia. Existirá dolor y congestión, con el calor o la menstruación, en la zona sobre los tobillos, al igual que el lipedema tipo B.

Estos tipos de lipedema no son los únicos, en medicina no todo es blanco o negro, existen los colores grises. Un lipedema tipo A podrá tener un pequeño componente del tipo B y viceversa. Es fundamental un correcto diagnóstico, tanto para el tratamiento ya sea con o sin cirugía, como para el pronóstico a largo plazo.

La Ecografía, la elastografía Strain y Shearwave, el Ecodoppler y la Bioimpedanciometria segmental multifrecuencia, serán fundamentales para un correcto diagnóstico y valoración.

Si necesitas más información o atención médica, ¡contacto con Clínicas Simarro! Nuestros profesionales están a tu disposición para ayudarte en tu tratamiento. 

Redactado por Comunicare

LEAVE A REPLY

Escribe un comentario
Escribe aquí tu nombre