El pasado jueves 25 de julio se jugó una serie de encuentros dentro de la fase preliminar de la Europa League, entre ellos se encontraba el que disputaron los portugueses del Sporting Braga y los israelíes del Maccabi Petah Tikva.
Pero el partido disputado en Braga fue escenario de una protesta en defensa del pueblo palestino. El lema ‘Palestina libre’ y las banderas palestinas estuvieron presentes por parte de los aficionados portugueses.
La presencia de una enseña palestina cerca de la grada donde se ubicaban los aficionados israelíes desplazados motivó la intervención policial que identificó a una aficionada y la retiró, tirándola al suelo lo que motivó protestas de los seguidores locales.
Además, durante todo el encuentro, los aficionados israelíes enseñaron su bandera y las autoridades no molestaron a nadie por exhibirla.
Ante lo ocurrido, el líder parlamentario del Bloco de Esquerda (BE), Fabián Figueiredo, remitió una pregunta dirigida a la ministra de Administración Interna, Margarida Blasco, sobre la retirada por parte de la Policía de una bandera palestina en el estadio municipal de Braga.
“Según información difundida por los medios de comunicación, un aficionado del Sporting de Braga llevó una bandera palestina al estadio, en un gesto de solidaridad con el pueblo palestino. Al final del partido, ante las protestas de otros aficionados, la Policía de Seguridad Pública retiró la bandera palestina del estadio”, señalan.
En la pregunta se recuerda que las fuerzas armadas israelíes ″están llevando a cabo una invasión de Gaza y han llevado a cabo varios ataques” que como resultado ha provocado ″el asesinato y la muerte de miles de niños y otros civiles”.
También recuerdan que en otros eventos deportivos y espectáculos culturales se han mostrado banderas de Ucrania, en solidaridad con este país, sin ningún problema. “No hay noticias de que las fuerzas y servicios de seguridad hayan retirado ninguna bandera ucraniana exhibida en solidaridad en estos contextos”, apunta el BE.
Así, el episodio “parece una clara violación de la libertad de expresión del aficionado que lo lució” ya que “exhibir la bandera de un estado, miembro observador de las Naciones Unidas, con misión diplomática en Portugal, no implica en ningún caso ni manera que se violan las leyes que rigen los eventos deportivos”.
“No es tarea de las fuerzas de seguridad limitar la libre opinión de los ciudadanos, que está protegida por la Constitución”, añaden.
En este contexto, BE quiere saber «de dónde vino la orden de retirada» y en qué «se basó» la Policía para realizar tal acto.
El Bloco de Esquerda cuenta con cinco parlamentarios de los 230 que forman parte de la Asamblea Parlamentaria de Lisboa y recientemente obtuvo un escaño entre los 21 que llevaba Portugal al Parlamento Europeo.
En lo deportivo, los Guerreiros do Minho ganaron 2-0, gracias a los goles de Ricardo Horta (56’) y Rodrigo Zalazar (59’) de penalti. El partido de vuelta se jugará el 1 de agosto en Bulgaria, al no permitir la UEFA que se dispute en Israel.