En el Instituto Cultural Rumano se puede contemplar la exposición Camino, de CălinPiescu. El título Camino está referido al Camino de Santiago, y en este caso, al trazado del Camino Francés, que va desde Roncesvalles hasta Compostela después de cruzar Castilla y León.
Así, en las fotos de Piescu, al lado de estampas lujuriantes como las que se ven en Navarra y en Galicia, hay instantáneas de trigales verdes y otros ya amarillos, propios de Tierra de Campos, donde la única línea de verdor y de frescor son los chopos de los ríos y los setos de las zonas ajardinadas.
Luego están los albergues, donde reposar y compartir experiencias con los compañeros de ruta, si bien el peregrinaje, insiste mucho en esto Piescu, es una experiencia de soledad.
Y así ha de ser, para que se produzca el encuentro con uno mismo, ese autoconocimiento tan ansiado que sólo el caminar puede proporcionar al peregrino.
Pero admira también el fotógrafo Rumano la belleza de las iglesias que se encuentra en el Camino y a cuyos pórticos se acoge, a su sombra milenaria, y cómo no, las catedrales románicas y góticas de las ciudades medievales que jalonan de reposo el Camino hasta llegar a la esplendorosa Santiago, que él retrata en varios colores y tonos, y que por ello muestra cómo cambia según el ojo.
Y siempre la figura del peregrino, su sombra, su espalda, su anonimato para hacerse digno de tal aventura.
Merece la pena verla.
¿Dónde?
Hasta el 3 de junio en el Instituto Cultural Român de la Madrid Plaza del Cordón, 1. Madrid.
- Imagen
- Paso honroso sobre el río Orbigo (León) ©Piescu