A un año de las elecciones europeas que se celebrarán en España el 9 de junio de 2024, el Eurobarómetro de primavera indica que el 71 por ciento de la ciudadanía es consciente del impacto de la UE en su vida cotidiana, el apoyo de la UE a Ucrania (69 por ciento) y la defensa de la democracia y el Estado de Derecho (64 por ciento) logran el mayor índice de aprobación, especialmente entre las personas jóvenes, que son las más proclives a reforzar el papel de la Eurocámara.
Según los datos de este Eruobarómetro, hechos públicos por la Oficina del Parlamento Europeo (PE) en España, existe un apoyo sólido de la ciudadanía a la democracia y un elevado nivel de información sobre la celebración de las próximas elecciones europeas, ya que manifiesta su interés una clara mayoría del 56 por ciento, tanto en la media de la UE como en el caso de España; seis puntos más que en 2018, un año antes de las últimas elecciones europeas.
Unos dos tercios de las personas encuestadas (67 por ciento) afirman que probablemente votarían si las elecciones europeas se celebraran dentro de una semana, mientras que en el Eurobarómetro de abril de 2018, esta cifra se quedó en el 58 por ciento, lo que indica que la predisposición a votar en las elecciones europeas de 2024 es actualmente mayor que en el mismo momento antes de las elecciones de 2019.
En el caso de España las cifras son similares, un 65 por ciento aseguran que probablemente votarán en los comicios que tendrán lugar entre el 6 y el 9 de junio de 2024, mientras que en 2018, a un año de las elecciones europeas de 2019 era un 56 por ciento el manifiestaba su interés.
La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, ha valorado que «las elecciones importan. Votar es la oportunidad para los ciudadanos y ciudadanas de pronunciarse sobre los temas que les preocupan. Hago un llamamiento para que todo el mundo, especialmente la gente joven, acuda a las urnas y contribuya a diseñar la Unión Europea en la que quiere vivir».
La ciudadanía europea considera que la democracia es el valor más importante que ha de defender el Parlamento Europeo. En concreto, el 37 por ciento de las personas encuestadas considera prioritaria la defensa de la democracia, seguida de la protección de los derechos humanos en la UE y en todo el mundo (28 por ciento) y de la libertad de expresión y de conciencia (27 por ciento).
Además, el 54 por ciento de las personas encuestadas considera satisfactorio el funcionamiento de la democracia en la UE. A la hora de valorar diferentes aspectos democráticos en la UE, el mayor índice de aprobación ciudadana es para las elecciones libres y justas (70 por ciento), la libertad de expresión (70 por ciento) y el respeto de los derechos fundamentales (66 por ciento), mientras que la lucha contra la desinformación y la corrupción es el elemento peor valorado.
En el caso de España, el 50 por ciento de los encuestados se muestra satisfecho con cómo funciona la democracia en la UE, y con tasas similares a las de la media europea: el 69 por ciento de los españoles está satisfecho con las elecciones libres y justas, el 68 por ciento con cómo funciona la libertad de expresión en la UE y el 64 por ciento con el respeto por los derechos fundamentales.
Por el contrario, solo el 28 por ciento está satisfecho con la lucha contra la corrupción y el 34 por ciento con cómo los partidos políticos tienen en cuenta los intereses de las personas.
Transcurridos cuatro años de la actual legislatura del Parlamento Europeo, la ciudadanía reconoce el liderazgo de la UE en la lucha contra las sucesivas crisis que han marcado este período. En su gran mayoría, las ciudadanas y los ciudadanos de la UE son conscientes del impacto que la UE tiene en su vida cotidiana: siete de cada diez (71 por ciento) comparten esta afirmación, incluido el 18 por ciento que considera que ese impacto es de gran calado. La ciudadanía es asimismo consciente del papel del Parlamento Europeo: el 62 por ciento recuerda haber oído hablar recientemente del PE.
En el caso de España, los datos revelan que el 64 por ciento de los encuestados reconoce el impacto de la Unión Europea en su vida cotidiana, incluido el 16 por ciento que considera este impacto de gran alcance. Casi seis de cada diez españoles (59 por ciento) admiten haber leído en la prensa, visto en Internet o en la televisión o escuchado en la radio algo sobre la Unión Europea y el Parlamento.
El apoyo de la UE a Ucrania disfruta del mayor índice de aprobación ciudadana (69 por ciento). Los niveles más elevados se registran en los Países Bajos (90 por ciento), Suecia (87 por ciento), Finlandia (87 por ciento) e Irlanda (87 por ciento) y los más bajos en Eslovaquia (45 por ciento) y Grecia (48 por ciento). La ciudadanía también aprueba con relativa buena nota la actuación de la UE en los ámbitos de la defensa de los derechos democráticos y del Estado de Derecho (64 por ciento) y de la política exterior (54 por ciento).
En España el índice de aprobación al apoyo ofrecido por la Unión Europea a Ucrania es del 72 por ciento, algo superior que la media europea. De hecho, es el ámbito de actuación con un mayor nivel de aprobación, siendo la siguiente área con mejores datos los derechos democráticos y respeto al Estado de derecho (61 por ciento) y la Agenda Digital (53 por ciento). En este caso, la peor nota se la llevan la recuperación económica y social (49 por ciento) y el Pacto Verde (49 por ciento).
Las múltiples crisis de estos últimos años han repercutido claramente en el bolsillo de la ciudadanía. La mitad de las personas encuestadas ha sufrido una disminución en su nivel de vida y cree que esta tendencia proseguirá durante el próximo año, mientras que casi un tercio adicional (29 por ciento) considera que su nivel de vida empeorará, aunque todavía no lo haya hecho.
Esta situación explica la exigencia de soluciones concretas: cerca de dos tercios (65 por ciento) de las personas encuestadas no están satisfechas con las medidas adoptadas por su país para hacer frente al aumento del coste de la vida, mientras que un 57 por ciento considera insuficiente la actuación de la UE para aliviar la situación.
En España, el 62 por ciento de los encuestados (doce puntos más que en la encuesta anterior) consideran que su nivel de vida ha disminuido y esperan que la tendencia se prologue durante los próximos meses.
Las medidas adoptadas por el Gobierno para hacer frente a esta situación no son suficientes para el 77 por ciento de los españoles, mientras que un cuarto de la población se siente del mismo modo con respecto a las medidas adoptadas por la UE.
En este sentido, la ciudadanía quiere que el Parlamento Europeo se centre de manera prioritaria en combatir la pobreza y la exclusión social (38 por ciento). Le siguen la salud pública (33 por ciento), la lucha contra el cambio climático (31 por ciento) y el apoyo a la economía y la creación de empleo (31 por ciento).
En España la primera prioridad sí que difiere de la media europea, ya que es la salud pública (con un 47 por ciento) la que lidera los temas prioritarios sobre los que el Parlamento Europeo debe poner el foco, seguido de la lucha contra la pobreza y la exclusión social (44 por ciento) y el apoyo a la economía y la creación de empleo (40 por ciento).
Antecedentes
La encuesta de primavera de 2023 para el Eurobarómetro del Parlamento Europeo se ha hecho por Kantar en los veintisiete Estados miembros de la Unión entre el 2 y el 26 de marzo. La encuesta se hizo de forma presencial (por vídeo asistido por ordenador en Chequia, Dinamarca, Finlandia y Malta). Se hicieron 26.376 entrevistas en total. Los resultados de la UE se ponderaron en función del tamaño de la población de cada país.