Amnistía Internacional informa de que en Canarias, a donde en el último fin de semana han llegado más de dos mil personas, está saturado y se están tramitando órdenes de devolución de cientos de personas sin tener la oportunidad de pedir asilo, lo que contraviene la ley de extranjería y el derecho internacional.
En el último fin de semana han llegado al puerto de Arguineguín, en Canarias, alrededor de 2500 personas, que se suman al número creciente de llegadas en los últimos meses, hasta alcanzar un total de 11 409 personas desde enero hasta el 1 de noviembre, según las estadísticas del Ministerio de Interior.
Amnistía ha pedido al Gobierno que establezca un mecanismo de emergencia con instalaciones adecuadas para sacar a las personas del puerto de Arguineguín, y garantizar que todas ellas, especialmente las más vulnerables, como las posibles víctimas de trata, tengan garantizados sus derechos.
La ONG indica que, a pesar del aumento de llegadas, no solo no se han acondicionado las instalaciones, sino que además hay que lamentar que la asistencia letrada es cada vez más deficitaria. De hecho, se están tramitando órdenes de devolución sin que las personas hayan recibido una adecuada asistencia letrada, tal y como exige el derecho internacional de los derechos humanos.
«Todas las personas tienen derecho a recibir una adecuada asistencia letrada, así como a acceder a sus derechos económicos, sociales y culturales, incluido el acceso a la salud, sin discriminación. Decretar órdenes de devolución directamente, tras haberlas tramitado en el puerto sin que las personas hayan accedido a una adecuada e individualizada asistencia letrada, para que puedan acceder a una información sobre sus derechos, entre ellos, el de pedir protección internacional, y que esta asistencia se produzca con traductores y en espacios adecuados, es una grave irregularidad a la que se debería poner fin de inmediato», ha declarado Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional España.
«Somos conscientes de que en 36 horas han llegado alrededor de 2500 personas, así como que se está haciendo un gran esfuerzo por seguir los protocolos sanitarios derivados de la pandemia, pero las autoridades no pueden obviar sus obligaciones legales. Las devoluciones pueden entrañar peligros para las personas en el país de tránsito o de destino, y muchas de estas personas huyen de la guerra y la persecución, y tienen derecho a protección internacional», asegura Virginia Álvarez, responsable de Política Interior en Amnistía Internacional España.
Amnistía Internacional lleva meses denunciando la situación de las personas migrantes y refugiadas, no solo en Canarias, sino también en los CETIS, especialmente en el de Melilla, que se encuentra hacinado y no puede garantizar la salud de las personas que están en él.
La oenegé ha enviado una carta al Ministerio de Sanidad, así como al de Interior y de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, para exigir el traslado urgente de personas migrantes y posibles refugiadas, especialmente de las más vulnerables hasta la Península, así como medidas adecuadas para garantizar la salud de las personas en los centros de acogida.