El Observatorio Madrileño de Salud -organización que engloba a diferentes ayuntamientos, sindicatos, asociaciones profesionales y entidades sociales de la Comunidad de Madrid, critica que el sistema sanitario público se encuentre debilitado por los recortes y las privatizaciones, financiado con presupuestos sanitarios insuficientes.
Estas conclusiones se sostienen en un análisis que enumera medidas urgentes para recuperar la sanidad pública madrileña después de la pandemia del COVID-19, informa Servimedia.
Según este análisis, las transferencias asignadas a la sanidad pública son insuficientes y sitúan a la Comunidad de Madrid por debajo de la media de las Comunidades Autónomas: entre 2010 y 2019 la Comunidad de Madrid ha destinado 10 822 millones de euros menos a la Sanidad Pública de lo que le correspondería para tener unos presupuestos per capita en la media de las comunidades, y en 2020 son 1600 millones menos.
Pero añade que este sucede «mientras el Gobierno madrileño del PP dejaba de recaudar 39 516 millones de euros perdonando impuestos a los más ricos y poderosos, y se situaba en 2020 como la comunidad autónoma que destina en sus presupuestos menos euros por habitante y año» a la sanidad pública.
A esto se debe la disminución de camas en los hospitales públicos, el deterioro de la Atención Primaria (AP), los recortes de personal sanitario, disminución de stock de material en los centros sanitarios, demoras en las citas en los servicios de la Sanidad Pública y «mala gestión del Gobierno de la Comunidad de Madrid» de los recursos disponibles.
Medidas urgentes
Ante esta situación, el Observatorio Madrileño de Salud considera prioritario, tanto para abordar los probables rebrotes de la pandemia, como para garantizar un funcionamiento de calidad de la Sanidad Pública madrileña, la implantación de medidas urgentes.
Entre ellas, presupuestos suficientes para la Sanidad madrileña, que debería de situarse al menos en 9500 millones euros para alcanzar el promedio de presupuesto por habitante del país; elaborar un Plan de Salud de la Comunidad de Madrid que aborde entre otros la salud medioambiental, salud laboral y eliminar las desigualdades o garantizar un veinte por ciento del presupuesto sanitario público destinado para la Atención Primaria.
Junto a ellas, añade el control del gasto farmacéutico para que el aumento se sitúe al menos un punto por debajo del crecimiento presupuestario; desaparición de los copagos asegurando que ninguna persona en la Comunidad se queda sin los medicamentos que precisa por motivos económicos, y aumentar las camas hospitalarias permanentes para alcanzar una ratio de cinco camas por cada mil habitantes (1,1 de ellas de media y larga estancia),
El Observatorio Madrileño de Salud también solicita el compromiso de resolver el 98 por ciento de las citas en Asistencia Primaria en 48 horas; recuperar la atención domiciliaria, la atención comunitaria y las labores de promoción y prevención desde la Atención Primaria; acabar con las privatizaciones; potenciar la salud mental comunitaria o aumentar las plantillas de los profesionales sanitarios, entre otras.