Año tras año, miles de alumnos y alumnas quedan fuera del sistema educativo por falta de plazas en centros públicos de formación profesional en Madrid, situación que UGT lleva años denunciando y que achaca a la falta de inversión de la Consejería de Educación en esta materia.
Se trata, sostiene el sindicato, de una decisión política adoptada en favor de las empresas privadas de Formación Profesional.
El curso pasado, UGT estimó en más de 40.000 los alumnos y alumnas sin plaza en centros públicos y concertados de Formación Profesional, cifra que no ha mejorado este año 2021 en el que los ciclos formativos con mayor demanda continúan siendo los ligados a las familias Sanitaria y Servicios a la Comunidad, donde las listas de excluidos llegan a superar los quinientos solicitantes por ciclo y centro.
Como siempre, también, quedarán algunas plazas sin cubrir en aquellos ciclos y familias menos demandados como Mantenimiento Electrónico, Automoción, Desarrollo de aplicaciones multiplataforma, Desarrollo de aplicaciones web o Química y salud ambiental, por ejemplo, pese a la demostrada empleabilidad de los mismos.
Cuando en 2014/15, la Comunidad de Madrid suprimió los conciertos y convenios de Formación Profesional de Grado Superior, fueron sustituidos por los «cheques de FP» que, sumados a las becas de segunda oportunidad (procedentes de fondos europeos), servirían para promocionar las empresas privadas de este tipo de enseñanzas, para ello era imprescindible no invertir en centros públicos y, en la medida de lo posible, dificultar el acceso a esos centro.
El objetivo se ha conseguido por varias vías: la disminución de centros públicos y el aumento de autorizaciones privadas, programas de admisión telemáticos que dificultan el procedimiento de admisión en centros sostenidos con fondos públicos, la falta de inversión y renovación de dotaciones públicas y las modificaciones en materia de educación a distancia que entorpecen, cohíben e imposibilitan la elección de esta modalidad por enseñanza pública.
A lo largo de estos siete cursos, se cuenta en la Comunidad de Madrid con 122 centros públicos de FP de Grado Superior frente a 227 centros privados y once centros privados con convenio.
Asimismo, 18 centros públicos imparten educación a distancia frente a 79 centros privados.
Estos datos dejan claro en qué sentido camina la Comunidad de Madrid en materia de Formación Profesional, mientras miles de alumnos, alumnas y familias hacen cola frente a los centros públicos en espera de que haya alguna vacante en las plazas y ciclos solicitados.
Para UGT está claro: los intereses de la Consejería priorizan el beneficio de las empresas privadas frente al de la ciudadanía, y no se garantiza el derecho a elegir de quienes optan por la enseñanza pública.