La Comunidad de Madrid ha alertado del número de pacientes adolescentes que ya se consideran adictos a las tecnologías debido al confinamiento producido por la pandemia por coronavirus.
Desde el pasado mes de marzo de 2020, se puso en marcha el Servicio de Atención en Adicciones Tecnológicas, que ha ofrecido tratamiento a veintidós menores y seguimiento preventivo a veinticinco familias, así como talleres de carácter preventivo a padres, cuidadores y profesionales.
Los servicios telepáticos que fueron ofrecidos al comienzo del confinamiento han prestado atención a estos pacientes de forma individualizada. La intervención psicológica por parte de los profesionales y educadores ha permitido que se puedan analizar los daños que se producen por el uso inadecuado de las nuevas tecnologías en jóvenes entre doce y diecisiete años de edad.
El bajo rendimiento escolar, el aislamiento social, el acceso a contenidos inapropiados y la pérdida de control a la hora de saber cuándo dejar estas actividades, son la primera señal de alarma en la que deben fijarse los padres y educadores.
Los servicios incluyen la evaluación de la conducta de los menores, conocer de primera mano cuál es la interacción que les provoca el uso de las tecnologías en su vida cotidiana y conocer su grado de pérdida de control y sus interferencias en otros ámbitos.
El abordaje se realiza mediante talleres virtuales, llamadas telefónicas, correos electrónicos y sesiones online, todas acciones de carácter preventivo.
