«Nana urgente para palestina», es el título elegido por el cantante hispanopalestino Marwán para la canción de cuna que ha compuesto para recaudar fondos para UNRWA, la agencia de los refugiados palestinos.
El padre de Marwán creció en las tiendas de UNRWA en el campo de refugiados de Tulkarem, en la Cisjordania ocupada. Mas de setenta años después, tiendas como esas dan refugio a miles de niños que huyen de los bombardeos israelíes en Gaza.
Marwán (Madrid, 1979) les ha escrito una nana, una canción que no acompaña sueños felices, sino que refleja el infierno.
Marwan compuso la canción en octubre de 2023, poco después de que comenzara la guerra: «Soporté el vientre de la artillería, el fuego en la guardería y todavía sigo en pie», reza la letra. «Soporté el miedo atroz entre las mantas, que todos me dieran la espalda, y todavía sigo en pie».
«La UNRWA es la agencia que ayudó a mi padre desde que nació. Nació en un campamento de refugiados y estuvo en una escuela de la UNRWA, donde recibió toda su educación hasta los dieciocho años. Siempre ha recibido su ayuda, en forma de comida, manutención, educación», explica en una entrevista con Noticias ONU, el boletín diario de Naciones Unidas.
«Es la agencia que sigue ayudando a millones de palestinos, a todos los gazatíes, y esto era lo único que yo podía hacer. Me gustaría hacer más, pero sin una solución política, poco más podemos hacer que manifestarnos y tratar de llevar nuestra ayuda»…
La familia de Marwán se fue a Jordania, pero su padre prefirió venir a España a estudiar. Aquí conoció a una joven española. Esa pareja son hoy los padres de Abu Tahoun Recio, conocido popularmente como Marwán.
El conflicto palestino israelí ha estado muy presente durante los veinte años que Marwán lleva en los escenarios. La «Nana Urgente para Palestina» habla de «los atropellos brutales y la ausencia de derechos», del «abandono que sufren los palestinos por parte de la comunidad internacional», pero cada estrofa repite que siguen en pie.
A pesar del abandono, de que les hayan dado la espalda, de los bombardeos, de las cosas que les hacen a los niños, de las muertes… quiero destacar la resiliencia de los palestinos, la capacidad del pueblo palestino para resistir incluso en las peores condiciones», explica.
La inmensa mayoría, siete de cada diez de los veintiocho mil muertos por los bombardeos israelíes, los miles de desaparecidos y los cerca de setenta mil heridos, son niños y mujeres.
Además, en este mismo periodo, en Cisjordania, han muerto 374 palestinos, incluidos 96 niños; y 4417 resultaron herido, de los que 670 son niños.