El delegado saharaui en Castilla y León, Mohamed Labat Mustafa, informó en Zamora a su alcalde, Francisco Guarido (Izquierda Unida), sobre la grave situación que vive el pueblo saharaui, agravada por la escasez de alimentos básicos, lo que está empeorando el estado de salud y nutricional de la población y, especialmente, el de los menores de cinco años, mujeres embarazadas, así como la población mayor de 65 años.
El alcalde manifestó que, a pesar de que por segundo año consecutivo tampoco podrá llevarse a cabo el programa ‘Vacaciones en Paz’, la aportación municipal se mantendrá para contribuir a la cobertura de necesidades básicas de menores y familias, que se desarrollan en los mismos campos de refugiados, a través de la Asociación Zamora con el Sahara, al tiempo que se comprometió a buscar otros posibles líneas de apoyo al pueblo saharaui.
En el encuentro celebrado en la Alcaldía zamorana, Labat agradeció la moción en solidaridad con el pueblo saharaui aprobada por el Pleno el pasado mes de noviembre de 2020, al tiempo que pidió el apoyo y colaboración con cualquier proyecto o solicitud de ayuda que se presente por las distintas ONG y asociaciones de amistad con el pueblo saharaui.
Además, pidió que sean avaladas por la delegación del Frente Polisario en Castilla y León, con el fin de evitar duplicidades y «con el objetivo de dirigir dichas actuaciones a las cuestiones más urgentes y de mayor necesidad para la población saharaui».
El delegado saharaui declaró que esta urgencia viene motivada por el incumplimiento en los últimos años de las organizaciones de ayuda internacional, como Acnur y PMA, del convenio firmado con la Media Luna Roja Saharaui, relativo a la dotación alimentaria en los campos de refugiados de Tinduf.
Una situación que se ha agravado por el cierre de las fronteras por la Covid 19, -que también está afectando en los campamentos saharauis- y la dificultad para mantener un stock de alimentos para cubrir las necesidades básicas de los refugiados.