La última casa rica del antiguo Leganés comenzó a ser derruida en marzo del año pasado (2023). Unos meses antes sufrió serios deterioros a causa de las inclemencias del tiempo sin que la propiedad hiciera nada por repararlas.
A medida que avanzaba el deterioro quedó claro que el destino de la mansión era el derribo. Y cuando se preguntaba por el futuro del edificio, la opinión más extendida era que carecía de importancia arquitectónica o histórica y que, por tanto, no tenia ningún tipo de protección por parte de la ley o los responsables de patrimonio.
Y esto ultimo es precisamente lo que acaba de ser puesto en cuestión por parte de la Subdirección General de Patrimonio Histórico de la Consejería de cultura Turismo y Deporte de la Comunidad de Madrid.
Según el requerimiento que esa subdirección dirige al Ayuntamiento de Leganés y a los actuales propietarios de la finca (o sea del solar en que se ha convertido ahora), «la casa solariega de la familia Fernández Cuervo, considerada una de las familias influyentes políticamente de Leganés desde que José Fernández Cuervo de Grado fuera el primer alcalde del municipio, ya se encuentra incluida en el plano histórico del municipio con la forma actual desde mediados/finales del siglo diecinueve».
En el mismo documento se recoge más adelante que la casa «se encuentra dentro del yacimiento arqueológico / paleontológico debidamente documentado Casco Histórico de Leganés, incluido en el Catalogo de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid, según la ley8/2023, por lo que las obras, tanto en la edificación como en la parcela, están sometidas al régimen de protección establecido en los artículos 61 y siguientes de dicha ley».
El mismo documento asegura más adelante qe la «casona» contaría con el régimen de protección de Bien de Interés Patrimonial. Hasta aquí, la situación legal de la «casona» de los Fernández Cuervo.
La Comunidad de Madrid tiene conocimiento el seis de marzo del año pasado (2023) de que ha comenzado la demolición del edificio. Dada la situación de protección de la casa, en ese momento se dirige una comunicación al Ayuntamiento de Leganés, entonces presidido por el socialista Santiago Llorente, pidiendo información sobre la licencia de demolición que se hubiera expedido y ordenando la paralización de esta hasta que se aclaren los hechos que llevan a esa demolición.
Pero no es hasta el 3 y 4 de abril, casi un mes después, cuando el Ayuntamiento de Leganés emite una respuesta diciendo que se ha girado una visita al inmueble el día 28 de marzo anterior y que el edificio está completamente demolido.
En el expediente abierto ahora se solicita tanto al Ayuntamiento como a la actual propiedad del solar una cantidad exhaustiva de información y documentos (fotos, licencias, proyectos técnicos firmados por técnicos competentes, etc) e incluso se solicita información sobre la posible existencia de restos con valor arqueológico y, por supuesto, información sobre los tramites administrativos previos a la demolición.
Los documentos existentes respecto a la casa están siendo supuestamente recopilados en la actualidad para ser remitidos a la Subdirección general.
De momento, se sabe, según la petición hecha por la Federación de Asociaciones Vecinales para personarse en el expediente, que la demolición se llevó a cabo sin la licencia municipal pertinente.
En cualquier caso, el edificio de la casona de los Fernández Cuervo ya no existe y la cuestión de futuro es cual va a ser el destino del solar. Según fuentes cercanas a las asociaciones vecinales y al ayuntamiento, la forma del solar y sus condicionamientos de protección de los posibles restos de valor histórico o arqueológico hacen que la posible rentabilidad de emprender la edificación del solar por parte de la propiedad se vea notablemente reducida.
Esa situación abriría de nuevo una posibilidad con la que se ha venido especulando históricamente: el posible intercambio de ese solar, en pleno centro de Leganés, por otros solares municipales con más posibilidades de explotación inmobiliaria. Si eso llegara a ser así, el ayuntamiento de Leganés se encontraría con la propiedad de un solar en el que se podrían construir equipamientos sociales y culturales destinados a beneficiar a la ciudadanía de Leganés.
Todo parece abierto aunque habrá que esperar. Ahora es el momento de que tanto la propiedad como el Ayuntamiento aporten todos los documentos requeridos para justificar el derribo aunque desde la Federación de Asociaciones Vecinales no descartan que «en el proceso de derribo se han podido dar irregularidades con posibles responsabilidades».