La pandemia de la COVID-19 ha reforzado la percepción ciudadana de que corresponde a la Unión Europea desarrollar soluciones efectivas para combatir las crisis y sus efectos, según un sondeo encargado por la Eurocámara a Kantar, en el que también se observa una subida en la proporción de los que consideran que la pertenencia de su país a la Unión Europea es positiva: un 63 por ciento de los europeos lo ve así, la cifra más alta desde otoño de 2007.
En el caso de España, la cifra de los que creen que es positivo formar parte de la UE es similar (66 por ciento). Del mismo modo, preguntados por si España se beneficia de estar en la Unión Europea, hasta el 75 por ciento considera que sí, principalmente porque creen que la UE contribuye al crecimiento económico del país (52 por ciento), mejora las condiciones de vida (33 por ciento) y supone nuevas oportunidades de empleo (27 por ciento).
Sin embargo, preguntados por las perspectivas en medio de una pandemia que continúa, aunque el 65 por ciento de los españoles ve con optimismo el futuro de la UE, el 54 por ciento cree que la situación económica en el país será peor dentro de un año, por solo el 22 por ciento que cree que las cosas estarán mejor en doce meses. No obstante, hasta el 55 por ciento confía en que su situación económica particular se mantenga, e incluso el 21 por ciento cree que su economía individual será mejor; misma cifra que los que creen que su situación empeorará.
Teniendo en cuenta las consecuencias económicas percibidas por los ciudadanos, estos indican como principal prioridad para el Parlamento Europeo la lucha contra la pobreza y las desigualdades sociales (61 por ciento de los españoles, 48 por ciento en la media europea). Los españoles son de los que más la señalan como prioritaria, detrás de Portugal, Chipre, Eslovenia y Grecia, y es la principal prioridad para todos los países salvo Finlandia, República Checa, Dinamarca y Suecia, que apuntan a combatir el terrorismo y el crimen como primer asunto.
Este es el segundo tema también para la media europea, aunque en España hay un mayor porcentaje que pide que se asegure una educación de calidad (48 por ciento), que es el tercer asunto a nivel comunitario. Llevar a cabo medidas para lograr el pleno empleo en toda la UE sería el tercer objetivo para los españoles (32 por ciento), seguido de la protección del medio ambiente y la biodiversidad (31 por ciento).
Respecto a los valores que el Parlamento Europeo debe defender, el 46 por ciento de los españoles cree que el primero debe ser la igualdad entre hombres y mujeres, una proporción solo superada en Francia, Suecia, Bélgica, Países Bajos e Irlanda. En segundo lugar en España, primero a nivel comunitario, está la promoción de los derechos humanos en el mundo (46 por ciento), y como tercero aparece la solidaridad entre Estados miembros (34 por ciento), empatado en el caso de España con la libertad de expresión.
La pandemia y el resto de retos globales a los que nos enfrentamos, como la emergencia climática, sostienen la visión de los ciudadanos de la necesidad de reformar la UE. Hasta el 78 por ciento de los españoles quiere dar mayor papel al Parlamento Europeo, de las proporciones más altas, solo superados por Chipre, Bélgica, Luxemburgo y Grecia, pero compartida por hasta el 63 por ciento de los encuestados europeos.
Igualmente, aunque hasta el 50 por ciento de los europeos tiene una imagen positiva de la UE (lo que supone un incremento de diez puntos porcentuales respecto a otoño de 2019), solo el 27 por ciento apoya el proyecto europeo tal y como está actualmente, mientras que el 44 por ciento lo apoya, pero pide reformas. El 21 por ciento se considera algo escéptico acerca de la UE, pero cambiaría si hubiera reformas de calado; solo el cinco por ciento se muestra completamente en contra de la Unión Europea.
El presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, ha asegurado que «el mensaje de esta encuesta es claro: los ciudadanos apoyan a la Unión Europea y creen que la UE es el sitio adecuado para encontrar soluciones a las crisis. Sin embargo, piden claramente una reforma de la UE, y por eso tenemos que dar inicio a la Conferencia sobre el Futuro de Europa lo antes posible».
Datos técnicos
Las 27 213 entrevistas hechas por Kantar para la configuración de esta encuesta se llevaron a cabo durante los meses de noviembre y diciembre de 2020. En el caso de España, las 1004 entrevistas se hicieron presencialmente entre el 25 de noviembre y el 16 de diciembre, siguiendo las medidas de higiene y distancia social, en línea con las recomendaciones de salud nacionales. En otros países, las entrevistas presenciales se han complementado con entrevistas por internet o se ha procedido solamente con esta modalidad telemática, debido a la pandemia.
