Dura menos la eternidad: México en la mirada de Rafael Doníz y Pedro Valtierra

Dos formas de mirar y narrar la historia reciente de México

Con este título tan surrealista, tan de realismo mágico, tan mexicano en una palabra, «Dura menos la eternidad», Fundación Casa de México presenta en su sede de Madrid 145 obras de dos de los fotógrafos mexicanos más destacados del siglo veinte: Rafael Doníz (Ciudad de México 1948) y Pedro Valtierra (Fresnillo de Zacatecas 1955), ambos discípulos reconocidos de Manuel Álvarez Bravo.

Las fotografías, en blanco y negro salvo excepciones, ocupan cinco espacios de toda la primera planta y retratan los grandes movimientos que México ha vivido en el siglo veinte, incluyendo los más devastadores terremotos en que la madre naturaleza se ha empleado a fondo, con incontables desaparecidos, inverosímiles rescates y escenas de una crueldad casi infinita.

Merecen la especial atención de la cámara las huelgas de mineros desnudos, por falta de una ropa adecuada para su trabajo subterráneo; los movimientos zapatistas de revolución, con sus símbolos y sus atuendos guerrilleros; los levantamientos populares contra el PRI, salvajemente aplastados, el entierro del niño muerto por desnutrición y cubierto de flores, las máscaras y los ritos de curación en santuarios de lodo a los que acudió el propio presidente de la República, las múltiples razas que perviven en México y los oficios populares, como el de salinero…

Y, por descontado, todo ello envuelto en los contrastes más brutales, como la vida, habida cuenta que ninguno de los dos fotógrafos, ni Deníz ni Valtierra, son fotógrafos de guerra. Ambos llegaron a la fotografía por azar y por vocación después de ejercer muchos otros empleos, como el de limpiabotas en el caso de Valtierra.

En palabras del comisario, Héctor Orozco, curador en jefe de la Colección y Archivo de Fundación Televisa, «Dura menos la eternidad es un recorrido por México a través de diferentes regiones y momentos históricos destacados: el movimiento del COCEI en Oaxaca, el terremoto de 1985, el mundial de fútbol en 1986, la visita del papa Juan Pablo II, el surgimiento del EZLN».

En resumen, esta exposición es una sacudida necesaria y muy oportuna en mitad de la modorra veraniega.

Merece la pena verla y dejarse arrastrar por las imágenes, algunas de las cuales ya envuelven los quioscos de la Gran Vía.

  • Dónde: Casa de México. Alberto Aguilera 20 (Madrid)
  • Cuándo: hasta el 8 de septiembre con acceso libre y visitas guiadas gratuitas

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