La Federación Española de Distribuidores de Gases Licuados del Petróleo (FEDGLP) ha anunciado la suspensión del servicio de reparto domiciliario de bombonas de butano en España un segundo día, el próximo 13 de noviembre 2024.
La medida se toma en respuesta a la negativa del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a atender las demandas del sector para mejorar las condiciones económicas de un servicio esencial para millones de hogares en el país.
Esta segunda jornada de suspensión de la distribución de bombonas refleja el malestar de los distribuidores, que denuncian la falta de diálogo con el Ministerio y la carencia de medidas adecuadas para asegurar la viabilidad económica de las agencias.
La FEDGLP subraya que, sin una revisión de la retribución por bombona, el reparto de butano seguirá siendo insostenible. A la fecha, el margen por cada bombona es insuficiente para cubrir los costos operativos, especialmente tras años de congelación de tarifas y el incremento de costos en otros ámbitos del sector.
La situación se agrava con la falta de una convocatoria formal del Ministerio para abordar el problema. Según la FEDGLP, este silencio institucional no solo prolonga el conflicto, sino que también transfiere toda la responsabilidad del servicio a las pequeñas y medianas empresas del sector, poniendo en riesgo la continuidad de un suministro vital para numerosas familias, en particular en zonas rurales y sectores vulnerables de la población.
Argumentos de los distribuidores
El sector de distribución de bombonas de butano en España solicita al Gobierno una actualización urgente de la Orden IET/389/2015, que regula las tarifas, dado que no se ha ajustado a las condiciones del mercado actual.
Según FEDGLP, la comisión por bombona debería situarse en al menos 4,80 euros para compensar las pérdidas que afrontan las empresas distribuidoras, frente a los 1,80 euros que perciben actualmente. Esta retribución se encuentra muy por debajo de lo necesario para garantizar un servicio sostenible y de calidad.
FEDGLP señala que la distribución de bombonas de butano es una actividad esencial para seis millones de hogares, especialmente en áreas rurales sin acceso a la red de gas.
Además, recalca que el precio máximo de la bombona está congelado desde la entrada en vigor del Real Decreto-Ley 11/2022, lo que limita aún más la capacidad de generar ingresos suficientes en un contexto de crisis energética.
Asimismo, el precio regulado en España es significativamente menor que en otros países de Europa, lo que acentúa las dificultades del sector.
Los distribuidores también argumentan que el bajo margen por bombona les impide hacer las inversiones necesarias, como la renovación de la flota de vehículos de reparto, una medida clave para reducir la huella de carbono y adaptarse a las Zonas de Bajas Emisiones.
Además, una actualización de la normativa facilitaría la digitalización de las agencias y permitiría ofrecer un mejor servicio al cliente, promoviendo un futuro más sostenible.
Finalmente, la FEDGLP advierte que, de no mediar una solución pronta, podrían programarse nuevas suspensiones del servicio, lo cual afectaría especialmente a los usuarios en situaciones de vulnerabilidad energética.
Calendario de suspensión
La suspensión del servicio de reparto a domicilio no es total, sino que se aplicará de forma intermitente en varias fechas concretas hasta finales de 2024.
Según el calendario inicial proporcionado por la federación, las fechas afectadas por la suspensión serán los días 5, 13, 21 y 29 de noviembre 2024, así como el 5, 11, 17 y 23 de diciembre 2024.