CCOO de Madrid considera muy grave que se vaya a poner a disposición de intereses económicos privados los bienes públicos de interés general, en el marco de las reformas que pretende aprobar el Gobierno del PP, a través de la Ley Ómnibus, que van a suponer graves e irreparables daños al medio ambiente madrileño, y comprometen el futuro de las próximas generaciones.
Según CCOO, «es inadmisible que se eliminen los controles preceptivos de evaluación ambiental, lo que abrirá la puerta al expolio de los recursos naturales, sin controles democráticos y en perjuicio de todos».
Se permiten construcciones para explotaciones turísticas, de ocio y para celebraciones, sobre suelos protegidos, e incluso en espacios naturales, a pesar de los daños irrecuperables que se puedan producir. El anteproyecto modifica tasas específicas que convierten en accesibles, solo para las élites, determinados servicios.
Fomento de la especulación
Ángel Juberías, secretario de Medio Ambiente y Movilidad de CCOO de Madrid, asegura que «también en el ámbito del medio ambiente, y bajo el pretexto de simplificar y agilizar trámites administrativos, se esconde un sistema que evita el control público en el acceso a los recursos naturales públicos, fomentando la especulación y comercializando su disfrute, que serán accesibles solo a los que más tienen».
Facilita la caza y la pesca en zonas hasta ahora prohibidas y de máxima protección, permite tratamientos silvícolas y la ejecución de obras y actuaciones en las zonas de mayor protección. Autoriza la implantación de negocios y actividades que hasta ahora estaban prohibidas por su elevado impacto en la naturaleza.
Se podrán hacer aprovechamientos forestales con una simple declaración responsable. Los daños que se causen sobre la flora, la fauna y los recursos naturales como: el suelo, las aguas o el aire serán irreversibles.
CCOO de Madrid considera que es imprescindible establecer controles previos a las actuaciones y no dejarlas a la «responsabilidad personal», porque genera desgobierno interesado y perjuicio o deterioro de los recursos naturales.
El anteproyecto apuesta por un modelo de desarrollo rural poco o nada sostenible, promueve la concentración, en manos de muy pocos, de recursos agrícolas y ganaderos, y favorece la ganadería intensiva en perjuicio de la tradicional y local, que es la que fija población al territorio.
También se ponen en peligro los parques regionales madrileños puesto que se podrá construir en ellos sin informe medioambiental previo.
La Ley Ómnibus fomentará el aumento de la contaminación al priorizar el transporte privado en contra del colectivo, más eficiente y sostenible.
Peligro de incendios forestales
Con las actividades que el Gobierno de Ayuso pretende imponer, se incrementa el riesgo de uno de los principales peligros y más frecuentes para el medio natural: los incendios forestales. Sin embargo, no está previsto destinar ni más medios humanos ni materiales para prevenir, controlar, extinguir y reparar los daños en caso de que se produzcan.
Por el contrario, es fundamental dotar de mayores y mejores recursos a estas actividades, incrementar las plantillas, la formación y las habilitaciones necesarias, así como el reconocimiento laboral de actividades tan complejas y arriesgadas, a la vez que imprescindibles, para el futuro de nuestro medio natural.
«Este anteproyecto de Ley es inconstitucional y muy lesivo para las futuras generaciones de madrileños y madrileñas», asegura Ángel Juberías, quien deja clara la posición de CCOO de Madrid: «Solicitamos la retirada inmediata de todas las medidas planteadas y que se escuche a organizaciones, asociaciones, partidos y sindicatos, que tenemos mucho que aportar para mejorar y no destruir el medio ambiente madrileño»
CCOO de Madrid forma parte de una amplia alianza social creada para frenar esta grave agresión a la democracia, el medio ambiente y el interés general.