La Comunidad de Madrid publicó el pasado 9 de diciembre una Orden en la que establece un complemento de productividad de cien euros para docentes no universitarios que hagan horas lectivas por encima del estándar establecido, informa Teresa Jusdado, secretaria de Enseñanza de la Federación de Servicios Públicos de UGT Madrid, quien ha anunciado que el Sindicato recurrirá esta Orden.
Desde UGT indican que esa Orden no ha sido negociada con los sindicatos y consideran que «camina en dirección contraria a las verdaderas necesidades del sistema educativo madrileño»., porque detrás de este cambio de condiciones laborales «vemos la intención de la Comunidad de paliar la falta de profesorado cargando todavía más la labor y la jornada del personal docente, en lugar de aumentar la plantilla y los cupos, que es la demanda de los centros educativos».
La citada norma afectará al profesorado de Secundaria, Formación Profesional y Régimen Especial, sobre todo en algunas especialidades. Y supondrá una modificación en los porcentajes de horas lectivas con respecto a las complementarias y de trabajo personal, suponiendo un gran retroceso en la batalla por la recuperación de las 18 horas lectivas y la reducción horaria en general, para todas las etapas educativas.
Estas nuevas condiciones laborales, en principio voluntarias, serán un problema para el profesorado interino cuando tengan que hacer sustituciones, porque no se aclara si se les obligará a completar un horario no elegido.
Lo consideran además una normativa vaga y muy poco concreta en la que, conscientemente por parte de la Administración, no se establecen criterios ni condiciones sobre horarios ni salarios. Establece un máximo de complemento (cien euros al mes) y un mínimo de horas (una a la semana) sin concretar nada más, cifras con las que la «hora extra» saldría a menos de cinco euros: «No conocemos ningún sector productivo que cobre las horas extraordinarias a este precio». indica el Sindicato.
Teresa Jusdado sostiene que el gobierno madrileño que preside Isabel Díaz Ayuso pretende cumplir con la normativa vigente que dice que «las Administraciones educativas prestarán una atención prioritaria a la mejora de las condiciones en que el profesorado realiza su trabajo y al estímulo de una creciente consideración y reconocimiento social de la función docente», pero «no parece que malpagando las horas de docencia directa de más se puedan mejorar las condiciones laborales del profesorado, ni la atención personalizada del alumnado».
UGT considera que si la Comunidad de Madrid quiere dignificar la labor del profesorado madrileño y mejorar el sistema educativo, lo primero que tiene que hacer es equiparar sus salarios al resto de Comunidades Autónomas y disminuir las horas lectivas.