El Juzgado de Instrucción número uno de los de Colmenar Viejo autorizó el 29 de marzo 2023, en el marco de una investigación articulada por el Equipo de Policía Judicial de Colmenar Viejo, una entrada y registro en un domicilio de la localidad para investigar una denuncia por malos tratos contra una menor de edad, ocasionados por su progenitor, informa la Guardia Civil.
En el registro también participaron el Fiscal de Guardia, Agentes tutores de la Policía Local de Colmenar Viejo, Servicios Sociales, así como agentes del Equipo Mujer Menor (EMUME) de la Comandancia de Madrid.
Los hechos investigados están relacionados con un delito contra los derechos y los deberes familiares, delito de malos tratos en el ámbito familiar, delito de violencia de género, obstrucción a la justicia y hurto, deteniendo por estos hechos a dos personas de nacionalidad española.
La investigación se originó unos días antes, a raíz de una denuncia donde se ponía en conocimiento de la Guardia Civil unos presuntos malos tratos contra una menor de edad, ocasionados por su progenitor.
A raíz de esta denuncia se procedió a un estudio pormenorizado del entorno familiar de la presunta víctima, contrastando también los datos con los agentes tutores de la Policía Local y servicios sociales de Colmenar Viejo. Todo ello permitió descubrir que además de la joven había otros siete menores que también pudieran ser víctimas de violencia doméstica.
Las primeras pesquisas arrojaron que los menores solían faltar constantemente a clase, siendo justificadas las ausencias escolares por el padre, que ejerce de médico en un hospital madrileño
Ahondando en estos hechos, se establecieron vigilancias en las inmediaciones del domicilio familiar, donde las sospechas confirmaron los recelos de los investigadores. La mujer una española de 44 años, madre de los menores, era víctima también de malos tratos, quien también ofrecía un trato degradante y descuido sobre sus ocho hijos.
Tras presentar las pruebas oportunas al titular del Juzgado, ordenó la inmediata la entrada y registro en el domicilio, donde se confirmaron todos los extremos.
La vivienda presentaba un estado de insalubridad en todas las dependencias a excepción del despacho del progenitor. De los dos baños existentes, solo uno de ellos era utilizado, encontrándose sucio y lleno de enseres. La cocina presentaba un aspecto deplorable, sin limpiar y en una situación higiénico sanitaria pésima. Los ocho menores malvivían en una habitación, tenían prohibido pisar el salón y eran castigados mediante maltrato físico o dejándolos a la intemperie en el patio de la vivienda.
Durante el registro se hallaron una gran cantidad de uniformes hospitalarios (batas, trajes de quirófano), material hospitalario (guantes, mascarillas, gasas, medicamentos…), de los que en un primer momento no pudo acreditar su procedencia lícita por lo que se investiga al varón por un delito de hurto.
Tras el análisis de los datos recabados en la investigación se pudo confirmar que los menores estaban en una grave situación de desamparo siendo víctimas de violencia doméstica.
Así mismo la madre, que resultó detenida, es a su vez víctima de delito de violencia de género decretando cautelarmente el Juzgado una orden de alejamiento con respecto a su marido.
A los progenitores detenidos se les atribuyen delitos de maltrato, contra los derechos y deberes familiares, obstrucción a la justicia. Además, al varón también se le atribuyen delitos de violencia de género y hurto.
Los menores han quedado ingresados en un centro de primera acogida de la Comunidad de Madrid. Ha sido retirada cautelarmente la Patria Potestad a los padres, los cuales tienen una orden de alejamiento impuesta con respecto a sus hijos.