Agentes de la Policía Nacional española y de la Policía francesa, en una operación coordinada por Europol, han desarticulado una red criminal dedicada a la trata de seres humanos y explotación sexual que operaba en Francia, en la que han sido liberadas ocho mujeres colombianas que eran explotadas sexualmente en pisos de citas y anunciadas en páginas webs, y se ha detenido a trece personas por trata de seres humanos, delitos relativos a la prostitución y pertenencia a organización criminal.
La investigación ha finalizado con trece entradas y registros -siete en Francia, cuatro en Oviedo y dos en Zaragoza-, en los que se han incautado 282.000 euros en efectivo y cuarenta terminales móviles. Además se han embargado 53.000 euros provenientes de cuentas corrientes y dos viviendas en Francia con un valor estimado en 340.000 euros. Toda la operación ha sido coordinada por Europol.
Las investigaciones comenzaron cuando agentes de la Policía Nacional descubrieron una organización criminal que se dedicaba a explotar sexualmente a mujeres de origen colombiano. Para ello, captaban a las mujeres y se aseguraban de que las víctimas llegasen a España para después ser trasladadas a Francia, en concreto a la localidad de Roche-sur-Yon.
Los miembros de la organización se encargaban de publicitarlas en páginas web para que ejercieran la prostitución en pisos de citas, aunque también podían ser desplazadas a hoteles o apartamentos donde prolongaban la estancia para aumentar el precio del servicio. Los beneficios obtenidos eran blanqueados e invertidos en inmuebles que la red había adquirido en Oviedo y Zaragoza.
Coordinados por Europol, la Policía Nacional y la Policía de Francia culminaron la operación con la liberación de las ocho mujeres colombianas y con la detención de trece personas en Francia acusados de pertenencia a organización criminal, trata de seres humanos y delitos relativos a la prostitución.
Contra la trata no hay trato
Esta operación se enmarca dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual. La Policía Nacional cuenta con la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo [email protected] para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial de este tipo de delitos, no quedando reflejada la llamada en la factura telefónica.