La cantidad de energía que uses dependerá de varios factores, como la cantidad de personas que viven en el hogar, cuántos electrodomésticos se usan y el tamaño de tu propiedad.
Generalmente, las fuentes de energía utilizadas en los hogares son la electricidad y el gas; el coste de tus facturas de energía dependerá tanto del tipo de energía que uses, la empresa instaladora de gas que hayas elegido, así como de la tarifa que tengas contratada.
Dado que los precios de la energía continúan aumentando y el impacto del uso de energía en el medio ambiente es cada vez mayor, es buena idea saber cómo reducir el consumo y ahorrar en la factura de la luz y del gas.
Cómo ahorrar energía con estos sencillos trucos
Con solo hacer algunos pequeños cambios en el estilo de vida, se puede marcar una gran diferencia en el consumo de energía de tu hogar. Sigue estos trucos sencillos para hacer que tu hogar sea más eficiente energéticamente y ahorrar dinero en tus facturas:
Mantenimiento de la caldera
La puesta a punto de la caldera no solo evitará complicaciones y averías derivadas de su funcionamiento, sino que también mejora el rendimiento y el ahorro de energía. En ciudades donde los inviernos son muy fríos como la capital, es imprescindible el mantenimiento de caldera en Madrid. Es recomendable que actives tu caldera durante al menos veinte minutos y observes su funcionamiento para comprobar si existe algún inconveniente que impida su que la caldera trabaje de forma adecuada.
Apaga los dispositivos en modo en espera
Algunos dispositivos usan pequeñas cantidades de energía en el modo de espera, como la televisión. Aunque las neveras y los congeladores siempre deben dejarse encendidos, la mayoría de los electrodomésticos se pueden apagar sin afectar a su programación, muchos de ellos no se suelen apagar del todo y se dejan en modo de espera, lo que podría aumentar innecesariamente las facturas de energía.
Para minimizar el uso de electricidad de un electrodoméstico, puedes empezar a usar dispositivos de ahorro, como un mando a distancia, que te permite apagar varios enchufes a la vez. Alternativamente, los enchufes inteligentes también pueden ayudar a programar y apagar cada electrodoméstico según las horas en los que los utilices.
Baja el termostato
Según los expertos en energía, reducir la temperatura de la habitación solo un grado puede ayudarte a reducir tu factura del gas, aproximadamente, un 10 por ciento al año.
Así mismo, instalar un termostato ambiente te permitirá controlar de forma automática los grados a los que debe estar la calefacción para calentarla adecuadamente. Los termostatos inteligentes dan la posibilidad de controlar la temperatura y gestionar la calefacción desde tu smartphone u otro dispositivo. Por ejemplo, si llegas a casa más tarde de lo planeado, puedes retrasar el encendido de la calefacción para evitar desperdiciar dinero y la energía.
Lava la ropa a una temperatura más baja
La lavadora es uno de los electrodomésticos más utilizados y representa alrededor del 16 por ciento del coste total en la factura de electricidad. Las temperaturas más bajas emplean menos energía, por lo que reducir la temperatura de los lavados de 40 °C a 20 °C, ayuda a minimizar los costes de funcionamiento en aproximadamente un 62 por ciento.
De igual modo, lava tu ropa cuando realmente sea necesario, en vez de meterla en la cesta de la ropa sucia después de utilizarla solo una vez. Hay prendas, como las sudaderas y pantalones, que pueden ser usadas más de un día si no tienen manchas ni están sudadas. Después de un día de uso, puedes colgarlas en el tendedero para que se aireen y ponértelas al día siguiente.
Usa el agua sabiamente
Cuanta menos agua uses, menos energía necesitarás para calentarla, así que intenta sustituir el baño por una ducha corta. Según los expertos, una ducha de cinco minutos usa aproximadamente el 50 por ciento del volumen de agua de un baño.
Para reducir el uso del agua, utiliza un recipiente con agua en lugar de dejar el grifo abierto para lavar los platos. Igualmente, esperar hasta que el lavavajillas y lavadora estén llenos antes de encenderlos, ayudará a reducir el uso de la energía, ya que la mitad de la carga consume más de la mitad de electricidad y de agua que una carga completa.
Controla tu uso de energía
Es posible que no sepas cuándo y cuánta energía utilizas en cada momento, incluso los cargadores, que están enchufados pero no conectados a los dispositivos, siguen usando electricidad.
La instalación de un medidor inteligente te ayudará a obtener información importante sobre tu consumo de energía y ayudarte a comprobar cuánto estás gastando, además de enviar lecturas directamente a tu compañía de gas o de electricidad. Al controlar tu uso de energía, puedes comenzar a identificar en qué estás malgastando la mayor cantidad de energía y cómo podrías reducir su uso.
Comprueba donde se generan corrientes de aire
La pérdida de calor de tu hogar hace que los costes de energía sean más altos, por lo que la vivienda tardará más en calentarse y será más difícil mantenerla caliente.
Para evitar esto, comprueba por dónde podría estar escapando el calor, la mayoría de las veces se producen corrientes de aire en las ventanas y en las puertas, por lo que instalar burletes en los bajos de las puertas o instalar marcos con cierres herméticos en las ventanas podría ayudarte a ahorrar una cantidad significativa de energía y dinero al mes.
