Las claves para llevar un estilo de vida más saludable pasan por una correcta alimentación, la práctica habitual de ejercicio físico, eliminar por completo los hábitos tóxicos y un descanso adecuado. ¡Toma nota y empieza el año por todo lo alto!
Alimentación saludable
Cuidar la alimentación es uno de los principios básicos para llevar una vida más sana. Debes saber que no existen dietas milagro, pues la clave está en hacer cinco comidas al día para evitar picar entre horas.
La fruta y verdura, así como los cereales, tubérculos y legumbres son una parte imprescindible en cualquier alimentación. Se recomienda consumir varias piezas de fruta y verdura al día y, por ejemplo, comer legumbres unas tres veces por semana.
De la misma manera, es recomendable reducir el consumo de carne a la semana y, en la medida de lo posible, priorizar las carnes magras y blancas, como puede ser el pollo. Y los alimentos que ofrezcan varias alternativas, mejor cocinarlos a la plancha y usar poca cantidad de aceite.
Por supuesto que de forma puntual o en ocasiones especiales se pueden consumir alimentos con una mayor ingesta calórica, pero no debe convertirse en la tónica habitual. Y otra parte fundamental es la hidratación: se deben beber unos dos litros de agua al día y priorizar esta bebida en todas las comidas.
Ejercicio físico, una de las claves para llevar una vida más sana
La alimentación saludable debe combinarse en todo momento con el ejercicio físico. Evidentemente, la práctica de actividad deportiva se debe adaptar siempre a las capacidades de cada persona y a su condición física para evitar sufrir lesiones o problemas mayores.
Una de las alternativas es buscar un gimnasio en Madrid, ya que es un espacio con maquinaria adecuada para todas las personas. Tú eliges la intensidad de la actividad y el centro en el que vas a pasar parte de tu tiempo libre. Sin embargo, Basic-Fit es una fantástica opción, pues con total seguridad encontrarás un gimnasio cerca de ti.
Y el deporte también se puede compaginar con pequeños gestos diarios, como utilizar las escaleras en lugar del ascensor, ir andando en vez de coger el coche o apostar por un sistema de transporte alternativo como la bicicleta.
Reducir los hábitos poco saludables
Hay hábitos poco saludables que en absoluto encajan con el deseo de querer llevar una vida más sana. De esta manera, es necesario evitar las bebidas alcohólicas, el tabaco y el consumo de cualquier otra sustancia perjudicial para el organismo.
Incluso vivir en el centro de ciudades muy contaminantes, aunque no sea responsabilidad individual, puede resultar peligroso para la salud por la mala calidad del aire. En la medida de lo posible, es recomendable evitar determinados espacios.
Un correcto descanso
Por último, el descanso nocturno es otro de los aspectos fundamentales. Los expertos recomiendan dormir ocho horas al día, ya que eso se aportará más energía a la mañana siguiente y la motivación adecuada para afrontar el día.
Además, la mala calidad del sueño afecta directamente al sistema cognitivo e inmunológico. En relación con esto, se recomienda mantener una correcta rutina del sueño, irse a la cama siempre a la misma hora y eliminar todas aquellas distracciones que puedan alterarnos.
