CCOO Sanidad Madrid ha enviado un escrito a la Dirección General de Recursos Humanos del Servicio de Salud en el que pide la negociación urgente de un nuevo Plan de Urgencias y Emergencias para la Comunidad de Madrid, que incluye la reapertura inmediata de los Servicios de Urgencias de Atención Primaria (SUAP), cerrados hace dos años para asignar personal al hospital Zendal.
CCOO advierte de que la temporada estival supone un riesgo muy alto de colapso en los servicios de Urgencia hospitalaria, por el cierre de un gran número de camas que año tras año lleva a cabo la Consejería de Sanidad, y porque las plantillas, ya infradotadas, se minoran considerablemente por las vacaciones de sus profesionales.
Si no se habilitan los servicios de los SUAP que descongestionan los hospitales y evitan los desplazamientos de usuarios que residen durante el verano en segundas viviendas, CCOO augura un verano en el que de nuevo los madrileños se enfrentarán con serios problemas que pondrán en jaque la atención sanitaria pública y a sus profesionales.
«No podemos permitir que los SUAP continúen cerrados. Solventan un millón de urgencias menores cada año y su cierre está provocando la saturación de la urgencia hospitalaria con problemas de salud de la ciudadanía madrileña que nunca deberían llegar a un hospital», asegura Ignacio Gómez, responsable de Atención Hospitalaria y Servicios de Urgencias de CCOO Sanidad Madrid.
Además, la realidad es que los SUAP tienen un déficit de médicos muy importante, situación que ya era crítica antes de la pandemia, dada la penosidad y falta de incentivos de este recurso para sus profesionales. La pandemia solo ha sido la excusa ideal para tapar un problema que ya se venía arrastrando en la sanidad madrileña.
Falta personal
Según los datos del portal estadístico de personal, a 31 de marzo de 2022, el SERMAS tenía una plantilla de 665 médicos adjuntos en urgencias hospitalarias (114 fijos, 353 interinos y 198 eventuales) y se necesitarían como mínimo un total de 878 para cumplir con los estándares y recomendaciones mínimas establecidas por parte del Ministerio de Sanidad.
En 2019, año prepandemia, se registraron 3.513.602 urgencias hospitalarias en el SERMAS y, según el estándar de calidad, haría falta el equivalente a un médico adjunto a tiempo completo por cada cuatro mil pacientes asistidos y año, por lo que la Comunidad de Madrid continúa muy por debajo de esa ratio.
Entre las 31 medidas para mejorar la atención y las condiciones laborales remitidas al SERMAS, CCOO pide instar al Ministerio de Sanidad a la revisión y modificación de la Orden Ministerial por la que se regulan los turnos de guardia y localización, el reconocimiento de la especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias, la supresión para los profesionales de las guardias de veinticuatro horas, el estudio de las plantillas con la consiguiente reconversión a plantilla estructural de los numerosos contratos eventuales y de refuerzo, la creación de unidades de corta estancia dependientes de los servicios de urgencias hospitalarios, con la adecuada dotación de personal, que servirían para aligerar la carga de ingresos en otros servicios y dinamizar las altas, sobre todo en períodos de mayor afluencia de pacientes.