Lo que fue el Club Maravilla de Torreblanca, «el puticlub más famoso del sur de España» que contaba con sala de baile, 33 habitaciones y dos suites con jacuzzi, situado en el último barrio de Sevilla junto a la autovía, acaba de cerrar y se ha convertido en una residencia del Centro Español de Ayuda al Refugiado (CEAR).
El realizador Juan Antonio Moreno ( autor de los magníficos documentales «Boxing for Freedom», «Palabras de Caramelo», «Nuestra vida como niños refugiados en Europa») se ha puesto una vez más al frente de un equipo de entusiastas solidarios para contar el día a día de algunos de los refugiados que hoy ocupan las habitaciones del antiguo burdel mientras esperan que les concedan al menos el permiso de residencia para poder emprender lo que será el resto de su vida, en España o en algún otro país de la Unión Europea. Una vida que necesariamente tiene que ser mejor que la que han dejado atrás, ya que vienen huyendo de la persecución, la guerra o el hambre.
Una vez más el cine se demuestra como una herramienta muy eficaz para mostrar lo que lamentablemente todavía hay gente que se niega a aceptar; esto es, que muchas, muchísimas personas exactamente iguales a nosotros, con los mismos derechos, escapan de unos países en los que no pueden ejercerlos y buscan refugio en nuestras calles.
No se trata únicamente de aspirantes a engrosar las colas del hambre –que ahora incluyen no solo a españoles pobres de solemnidad por nacimiento, sino también a titulados universitarios y exempresarios a los que la vida ha maltratado-, son también individuos que esperan poder demostrar sus conocimientos y aptitudes –como ese chico de Mali que habla cinco idiomas y varios dialectos, y estudió contabilidad- lejos de los horrores que han vivido.
Hay muchos hombres solos, algunas mujeres y varias familias: prácticamente en directo, en el documental asistimos al nacimiento del bebé que hace el número once de esa familia, a cuyo progenitor lo que más le preocupa es -por este orden- tapar el pelo de su mujer acostada en la cama del hospital y averiguar si existe alguien que pueda circuncidar al recién nacido «porque es varón».
(Con toda sinceridad, pese a que a estas alturas eso de la circuncisión de los chicos me parece fuera de lugar salvo por prescripción facultativa, he dado un suspiro de alivio al saber que «ha sido varón». No quiero ni pensar en que el orgulloso padre, que ha atravesado el Mediterráneo con una familia de proporciones desmedidas, se hubiera atrevido a pedir lo mismo si el bebé fuera niña).
Con un miedo perfectamente explicable, y con la necesaria dosis de ilusión ante un futuro incierto pero posiblemente mejor que el pasado, esos jóvenes y esas familias que han llegado hasta el centro sevillano de CEAR se enfrentan a lo inesperado, a aprender otra cultura y otra lengua, a aceptar formas y normas de vida que hasta ahora les eran completamente ajenas.
«Bienvenidos a España», que recibió el premio Biznaga de Plata en la Sección «Afirmando los Derechos de la Mujer» del Festival de Málaga, llega a las pantallas españolas el viernes, 18 de junio de 2021.