Argelia anunció este martes 24 de agosto de 2021 la ruptura total de relaciones diplomáticas con su vecino Marruecos. La decisión se adopta tras la reunión del Consejo Supremo de Seguridad, presidida por el presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, el pasado 18 de agosto, donde se incluyó una revisión de las relaciones con Marruecos y el aumento de la vigilancia de la seguridad a lo largo de toda la frontera que comparte con el reino alauí.
El ministro de Asuntos Exteriores de Argelia, Ramtane Lamamra, fue el encargado de hacer pública la ruptura de las relaciones diplomáticas tras meses de tensión larvada entre los dos países.
Entre los motivos de la ruptura se encuentran «una larga serie de actos hostiles», entre ellos, el comunicado difundido por el embajador de Marruecos ante Naciones Unidas, Omar Hilale, apoyando el derecho de autodeterminación de la región bereber argelina de la Cabilia y al grupo Movimiento por la Autodeterminación de la Kabilia (MAK) considerado «terrorista» por Argel.
Además la reciente ola de incendios que el gobierno argelino achaca al MAK y al grupo islamista Rashad, en connivencia con Marruecos, también ha sido mencionada por Lamamra. Del mismo modo, ha influido, el conflicto y ocupación del Sáhara Occidental por parte de Marruecos, recordando que el reino alauí «bloquea hacer un referéndum para solucionar el contencioso» de este territorio, considerado una colonia por Naciones Unidas. Actualmente siguen los hostigamientos en la zona del muro entre el Frente Polisario y el ejército marroquí.
De hecho, en 1976, hubo otra ruptura diplomática entre Argelia y Marruecos a raíz del reconocimiento argelino de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), entonces, la iniciativa la tomó Rabat.
Del mismo modo, la reciente publicación del escándalo de espionaje a «ciudadanos y responsables argelinos a través de una tecnología israelí», el programa Pegasus, por parte de Marruecos, ha provocado otra gota más en el deterioro de las relaciones entre ambos países.
Asimismo, el lunes 16 de agosto, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Argelia acusó a Marruecos de hacer declaraciones «falsas» con el fin de arrastrar a Israel a una «peligrosa aventura» contra su país, tras la visita del ministro israelí de Exteriores, Yair Lapid, a Rabat, donde condenó el acercamiento de Argelia con Irán.
«Desde 1948 ningún responsable israelí hizo una declaración hostil contra un país árabe a partir de otro país árabe», señaló Lamamra.
Hay que recordar que Marruecos restableció relaciones con Israel el pasado diciembre de 2020 tras el reconocimiento por el expresidente estadounidense Donald Trump de la soberanía marroquí sobre el Sahara.
El presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, en unas declaraciones el pasado mes de julio al semanario francés Le Point, señaló que seguirá el cierre terrestre de la frontera, que lleva clausurada más de veinticinco años, «la ruptura con Marruecos –y estoy hablando de la monarquía, no del pueblo marroquí- se remonta a tanto tiempo que se convirtió en algo común».
Además recordó que Marruecos siempre fue «el agresor», aludiendo a la guerra de las arenas de 1963: «nunca atacaremos a nuestro vecino, pero tomaremos represalias si somos atacados».
En mayo de 2020, fue expulsado el cónsul marroquí en Orán, Ahadran Boutahir, tras definir como «país enemigo» a Argelia. Dos meses después, Marruecos también cambió a su embajador en Argel.
Reacción marroquí
Por su parte, Marruecos ha tomado nota de la decisión de las autoridades argelinas de romper las relaciones diplomáticas.
Marruecos lamentó esta decisión «completamente injustificada pero esperada», en vista de la lógica de la escalada observada en las últimas semanas, rechazando «categóricamente los pretextos falaces, incluso absurdos, que subyacen».
Además, afirma que seguirá siendo un «socio creíble y leal para el pueblo argelino y seguirá actuando, con sabiduría y responsabilidad, para el desarrollo de unas relaciones intermagrebíes saludables y fructíferas».
Marruecos celebra elecciones generales el próximo 8 de septiembre y su jefe de Gobierno, Saadedín El Ozmani, señaló que si es reelegido procurará mejorar las relaciones con su país vecino.
Por último hay que recordar que España se verá indirectamente afectada ya que termina el paso del gasoducto argelino a través de Marruecos, que no será renovado, y que discurría hasta Tarifa. A partir de ese momento, Argelia proveerá de gas a nuestro país a través de Almería.