El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, en una sesión presidida por Rusia, ha discutido este 17 de julio de 2024 la grave situación humanitaria en Gaza, la intensificación de la violencia en Cisjordania y las acusaciones mutuas entre Palestina e Israel, así como la implicación de Irán y Estados Unidos en el conflicto.

Según un informe inicial de la Secretaría General, el sistema de apoyo humanitario en Gaza está al borde del colapso total. La intensificación de la ofensiva israelí y el cierre del cruce de Rafah han dificultado la distribución de ayuda, dejando a casi dos millones de personas desplazadas.

Además, la violencia en Cisjordania, incluida Jerusalén Oriental, ha aumentado, resultando en la muerte de 553 palestinos y 22 israelíes desde octubre de 2023. Las operaciones de seguridad israelíes y los enfrentamientos con militantes palestinos han exacerbado la situación.

Confiscación de tierras palestinas

La confiscación de tierras palestinas en Cisjordania ha aumentado significativamente debido a las políticas administrativas y legales de Israel.

El Consejo de Seguridad destacó que estas acciones incluyen la expropiación de grandes parcelas de terreno y la expansión de asentamientos, lo que altera gravemente la geografía del territorio ocupado y afecta a las comunidades palestinas.

Estas medidas no solo complican las perspectivas de una solución de dos Estados, sino que también incrementan las tensiones y la violencia en la región, según las deliberaciones del Consejo.

Catástrofe humanitaria «fabricada» por Israel

El embajador palestino, Riyad Mansour, acusó a Israel de fabricar deliberadamente una catástrofe humanitaria en Gaza.

Durante la sesión del Consejo de Seguridad, Mansour afirmó que Israel utiliza el hambre y la enfermedad como herramientas de guerra contra los palestinos.

Mansour sostuvo que el bloqueo de Gaza y la limitación de acceso a recursos esenciales son estrategias intencionadas para debilitar a la población y forzar su sometimiento; y que esta situación ha generado un profundo sufrimiento entre los civiles, exacerbando la crisis humanitaria en la región.

El embajador palestino subrayó también el apoyo global a los derechos de los palestinos y la solución de dos Estados e instó al Consejo de Seguridad a proteger a las víctimas y a respaldar a quienes buscan la paz, resaltando el consenso internacional sobre la necesidad de justicia y autodeterminación para el pueblo palestino.

Acusaciones cruzadas

El representante israelí acusó a Irán de ser el principal instigador del conflicto en Gaza, alegando que Teherán extiende su influencia y financia grupos militantes para desestabilizar la región y atacar a Israel.

Y el ministro ruso Sergei Lavrov, quien presidía la sesión, afirmó que la política de Estados Unidos en Oriente Medio, incluyendo la venta de armas a Israel, convierte a Washington en un participante directo en el conflicto. Lavrov sugirió que estas acciones contribuyen a la escalada de violencia y dificultan los esfuerzos por alcanzar la paz.

Iniciativas de Estados Unidos para conseguir la paz

La embajadora estadounidense Linda Thomas-Greenfield destacó en respuesta los esfuerzos de su país junto a Qatar y Egipto para lograr un alto el fuego en Gaza, facilitar la liberación de rehenes y permitir la entrada de ayuda humanitaria.

Aseguró que Estados Unidos también está trabajando en iniciativas diplomáticas para promover una solución pacífica y duradera en la región.

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